Las ruedas de prensa de Pedro Sánchez suelen ser interminables sesiones de tortura para los españoles que esperan salir del arresto domiciliario al que los ha sometido el Gobierno.
Homilías en ‘neolengua’ orwelliana en lo que importa es ocupar minutos de telediario simulando estar venciendo al virus. Las preguntas de los periodistas, casi siempre de medios subvencionados con dinero público, suelen estar hechas para el lucimiento de Sánchez.
Pero este 28 de abril de 2020, al ‘Aló, presidente’ de Sánchez y su ‘comisario político’ Miguel Ángel Oliver se le coló una periodista incómoda: Laura Pérez Maestro, de la CNN.
Pese a ser un medio ‘amigo’ de la izquierda, la periodista le lanzó a Sánchez tres preguntas que más bien parecían puñales_
—Más de 38.000 sanitarios se ha contagiado con Covid-10 en España. ¿Por qué el Gobierno no publica la cifra de sanitarios fallecidos por coronavirus?
—Médicos y enfermermas han denunciado en repetidas ocasiones no tener el equipo de protección necesario. ¿Acepta el Gobierno su responsabilidad por esta gran infección en profesionales sanitarios?
—Y finalmente, ¿por qué es tan difícil aumentar el número de pruebas en nuestro país siendo tan importante para esta estapa de desescalada? ¿Piensa que el Gobierno debería haber encomendado a empresas españoles producir los test en lugar de ir a comprarlos a China?
Sánchez miró hacia la pantalla de televisión por la que se emiten las preguntas como si quisiera quedarse con la matrícula de la periodista. Agredeció las preguntas al estilo Manuela Carmena, tuteando a la periodista con exceso de confianza y llamándola por su nombre: «Gracias, Laura….»
Como era de esperar Sánchez no respondió a ninguna de las preguntas, pero sirvió para demostrar que el presidente al que las redes sociales llaman ‘El Enterrador’ no sabe la cifras de sanitarios fallecidos, dato relevante teniendo en cuenta de que España es líder mundial en contagios en el personal sanitario. «Desconozco esa cifra, la preguntaré al Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, dijo.
«El criterio de este Gobierno es como siempre la máxima transparencia», mintió sin mover una ceja. «La principal obsesión del Gobierno de España ha sido proveer de EPIs al personal sanitario. Nos hubiera gustado proveerles con mayor celeridad en un mercado tan restringido. Pero esto por suerte gracias al buen hacer no solo de las CCAA sino de de este Gobierno ha dejado de ser una urgencia».
Sánchez prefiere hablar de los EPIs y no de las mascarillas ‘fake’ Garry Galaxy que este Gobierno compró por 2,1 millones a una empresa sin licencia y que causaron estragos entre los sanitarios.
«En relación con los test, hay datos que avalan que España es uno de los países que más test ha realizado», dijo Sánchez antes de soltar el bulo: «Ayer la OCDE nos ponía en el puesto octavo».
Es otra mentira. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) se ha visto forzada a rectificar tras descubrirse que los datos de España por los que aparecía en el «top ten» de los países que más test de coronavirus realizan no eran homologables con los de los demás.
Por tanto, pasó de ocupar el octavo puesto por el que presumía Pedro Sánchez al décimo séptimo. Un bulo más de este Gobierno que toma por idiota a los españoles.
‘EL QUILOMBO ‘ – PROGRAMA COMPLETO DEL 29 DE ABRIL DE 2020
