En el último Pleno Extraordinario del ayuntamiento madrileño de Coslada, el alcalde socialista, Ángel Viveros, que gobierna con el apoyo de Podemos y Más Madrid, firmó la convalidación de una modificación de crédito por valor de 222.100 euros, supuestamente para combatir la crisis del Covid-19.
Dicha partida, no contaba con ningún informe técnico que, de manera pormenorizada, desgranase el destino de las cuantías. De hecho, 175.000 euros del montante total, se van a destinar a gastos de personal, sin justificación alguna.
Desde la oposición, fuentes populares explican que “lo que no podemos permitir es la contratación a dedo de nuevos asesores en plena crisis sanitaria y votar a favor de ingentes partidas económicas sin aparente justificación amparadas en esta situación excepcional”.
Las mismas fuentes populares recuerdan que a mediados de abril enviaron un escrito al Ayuntamiento para que procediese de forma urgente a la adquisición de cuantas mascarillas sean necesarias para garantizar la protección de todos los vecinos de Coslada, repartiendo las mismas en todos los buzones del municipio y en un número no inferior a diez unidades por vivienda.
“Se han comprometido a hacerlo, pero casi dos meses después de declararse el Estado de Alarma el Ayuntamiento no ha entregado ni una sola mascarilla a nuestros vecinos”.
Acusan al “tripartito social comunista” de “repartir sin escrúpulos” puestos de mandos a “sus amigos”, cuando “ni siquiera se han preocupado por repartir mascarillas a los cosladeños”.
Se amparan en el Covid-19 para nombrar un nuevo cargo de confianza
Un ejemplo sobre el reparto de sillones “sin escrúpulos” es el del nuevo asesor de política medioambiental, inscrito a la concejalía de Medio Ambiente, dirigida por el edil de Podemos, Julio Huete. El alcalde socialista, Ángel Viveros, lo firmó a mediados de marzo bajo un Decreto de Nombramiento y que contará con unas retribuciones anuales de 46.600 euros. Además, la firma del Decreto de Alcaldía establece además el carácter retroactivo a fecha 9 de marzo, por lo que el nuevo asesor lleva cobrando prácticamente dos meses sin acudir a su puesto de trabajo.
Tripartito de izquierdas: nada nuevo en lo que llevamos de mandato
Cuando no habían transcurrido ni tres meses el equipo de Gobierno votó a favor de subir 3.000 euros anuales sus retribuciones sin ninguna justificación. Una situación que generó bastante malestar desde la oposición.
Desde el Grupo Popular mantienen que se intentó trasladar al último Pleno Ordinario una moción para retraer esta subida con motivo de la crisis del coronavirus mediante una declaración de esfuerzo para demostrar que los cargos públicos deben estar al lado de quien lo más lo necesita. “La falta de ganas del tripartito social comunista” por debatir la moción popular ha provocado que el alcalde socialista ignore la celebración del Pleno Ordinario de abril, convocando un Pleno Extraordinario a finales de mes, y que no contó con el debido apartado de control y fiscalización, evitando así el debate sobre reducción de las retribuciones.