Tremendo e inexplicable. El homicida tenia 41 años y la víctima ya había cumplido los 80. Y la mató a conciencia, sabiendo lo que iba a hacer después.
Agentes de la Policía Nacional encontraron el pasado 20 de marzo de 2021 el cuerpo sin vida de una mujer de 80 años en su domicilio del madrileño barrio de Aluche y el cadáver de su hijo de 41, precipitado en la vía publica junto a la vivienda.
Los hechos ocurrieron a primera hora del pasado sábado, cuando agentes de seguridad ciudadana se personaron en la calle Camarena, alertados por una persona que alertaba que su pareja le había enviado varios mensajes a través del teléfono móvil en los que anunciaba su intención de quitarse la vida.
Cuando llegaron los agentes, se encontraron el cuerpo sin vida de un varón precipitado en la calle y tras realizar diversas gestiones averiguaron el lugar del desde el que podría haberse precipitado al vacío.
Una vez accedieron al domicilio, encontraron el cuerpo sin vida de una anciana que resultó ser la madre del hombre precipitado.
Hasta el lugar se desplazó un equipo del Grupo de Delitos Violentos de Policía Científica y agentes del Grupo V de Homicidios que se hicieron cargo de la investigación.
Tras varias gestiones y la práctica de las respectivas autopsias, los investigadores barajan la hipótesis de que el varón tras acudir al domicilio de su madre, acabó con su vida asfixiándola con una almohada, para arrojarse posteriormente por la ventana.
