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El Quilombo: Periodista Digital contra Atresmedia, la madre de todas las batallas

Comienza la madre de todas las batallas. Atresmedia quiere silenciar para siempre al único que medio que le ha plantado cara asumiendo un altísimo coste, el medio al que quiso callar a cambio de sillones en tertulias para que dejara de denunciar sus tropelías. Es David contra Goliat. Nos veremos en el banquillo.

En el plano político… Traigan una encuesta en la que diga que VOX se queda fuera del 5 por ciento. No existe.

Las intrigas de Morodo, infiltrada de Ferreras en Génova, las conocemos de sobra. Lleva meses diciendo que Ayuso es un problema para Pablo Casado como si les robara las ideas a El País. Marhuenda ha pasado de burlarse de Casado (a quien despreciaba diciendo que era el nieto de Churchill hace dos años) ha apoyarle una vez que le hizo caso y decapitó a Cayetana Álvarez de Toledo. Marhuenda es Casals y Casals es Atresmedia y el mundo del dinero.

Y el mundo del dinero, el IBEX para que nos entandamos, quiere a un PP centradito, dócil y maleable, con el pin de la Agenda 2030 en la solapa que se vea bien y que le diga todo que sí a Pedro Sánchez que es su ojito derecho, el que les va a llenar las arcas con dinero fresco de Bruselas.

Esto viene de lejos. Casado no era el candidato de Casals. Era Soraya, con la que hacían el tándem perfecto para entregarle los medios a la izuqierda al tiempo que asesinaban mediáticamente a los enemigos del rajoyismo en una guerra civil dentro del PP. Que se lo pregunten a Soria, Rato, Cifuentes, Aguirre, Ignacio González… si la derecha no tiene apoyos se lo tiene que agradecer a esta parejita.

Le exigió a Casado que le entregara a Sánchez un cheque en blanco en plena pandemia. Aplaudió que decapitara a Cayetana (no por su linea ideológica sino porque se había atrevido a meterse con laSexta acusándola de hacer «negocio con la erosión de la democracia») pero Marhuenda dijo que no rompiera amarras con VOX aunque luego se derritió con los insultos de Casado a Abascal con la moción de censura. Tanto a El Mundo como a La Razón se le hacía agua a la boca cuando Casado rompía con VOX para pactar con el PSOE y el PNV. Y todo esto iba viento en popa hasta que Moncloa se dio un tiro en el pie en Murcia y dejó herida de muerta a Arrimadas.

Pero como si esto no fuera suficiente, faltaba que el inefable Julián Quirós, de ABC se sumara al pijama party de Teodoro con otra portadita para enmarcar. Cómo te extrañamos Bieito… Quirós es el genio que necesita poner «Independentistas en Vic «atacan» a Garriga y Smith, que tienen que salir custodiados». Un uso de la doble comilla en el verbo atacar cuanto menos pernicioso, puesto que la existencia de imágenes y grabaciones ya prueban por si solas las agresiones.

Quirós decía, entre otras cosas, que «el señorito Iván» tiene una fijación contra ABC porque quizás «su padre le sacudía con el periódico en la coronilla, con grapa y todo, cada vez que volvía a casa con un suspenso temiendo que ese chico no llegaría a nada si no metía cabeza en la política». A Quirós el ABC le queda tan grande como los trajes a Pablo Iglesias.

La prensa vegana es un aparato de vasallaje propagandístico, en una herramienta al servicio de un partido.

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