La pipera era la jefa.
Agentes de la Guardia Civil, con destino en la Unidad de Seguridad Ciudadana de Tres Cantos, han detenido a una mujer de origen colombiano, que almacenaba, distribuía y vendía diferentes sustancias estupefacientes desde el interior de un establecimiento público situado en la localidad madrileña de El Álamo.
Los hechos sucedieron la noche del pasado 11 de junio de 2021, cuando los agentes se encontraban realizando un servicio de seguridad ciudadana en el municipio de El Álamo y detectaron a varios jóvenes que portaban dosis de sustancias estupefacientes de similares características.
Al preguntarles por la procedencia de las dosis por separado, varios de ellos manifestaron haberlas adquirido en un establecimiento de la zona, lugar además frecuentado a menudo por menores de edad. Entonces, los agentes se dirigieron al local al objeto de realizar una inspección en materia de seguridad ciudadana, por si desde allí se estuviera distribuyendo algún tipo de sustancia, tal y como habían manifestado los jóvenes.
Preguntada la propietaria del mismo por los hechos entregó de manera voluntaria dos dosis de una sustancia amarronada similar al hachís, y otras dos de un polvo blanquecino que podría ser cocaína, todas ellas similares en preparación y envoltorio y que estaban ocultas en la parte interior de la caja registradora.
Asimismo los agentes hallaron en una de las baldas del establecimiento una cajetilla de tabaco que contenía más dosis. Al encontrarse comunicado el establecimiento con su vivienda por una puerta, la Guardia Civil solicitó permiso para realizar entrada y registro, accediendo la misma y presenciando los hechos como testigos dos agentes de Policía Local.
A lo largo de las diferentes estancias, muebles, adornos y figuras de la vivienda los agentes encontraron 2.145 euros fraccionados en 190 billetes, 4 bolsas plásticas que contenían una sustancia blanquecina en roca similar a la cocaína y que estaban ocultas en la cisterna de uno de los inodoros, 4 básculas de precisión y numerosos envoltorios de idénticas características a los encontrados a los jóvenes y a los que ocultaba en la caja registradora.
Por todo ello arrestaron a la propietaria, Y.B.C., mujer de origen colombiano de 44 años de edad y a quien por estos hechos se le imputa un delito contra la salud pública, por tráfico de drogas.