Otro lío diplomático en el que se mete Pedro Sánchez.
La anulación de un contrato con Israel para la compra de 15 millones de balas vuelve a poner de manifiesto que el presidente del Gobierno no tiene margen de maniobra y que está a expensas tanto de sus socios de investidura como de su socio en el Ejecutivo, Sumar.
Carlos Herrera, director de ‘Herrera en COPE‘, que está en Roma para seguir en primera línea el funeral del papa Francisco, que tendrá lugar el 26 de abril de 2025, sacó a la luz las contradicciones del inquilino de La Moncloa:
Hoy el asunto político, que tendría más trascendencia hoy, de no ser por lo que nos ha traído hasta aquí, es la noticia de que Sánchez ha ordenado paralizar el contrato firmado con una empresa israelí de 15 millones de balas. Es un vodevil de políticos hipócritas y torpes que paga usted con sus impuestos y es que por el hecho de romper ese contrato hay que pagar una sanción de seis millones y medio. ¿Alguien será responsable? ¿Adoptará algún tipo de consecuencias?
Para el comunicador estrella de la radio episcopal, Pedro Sánchez no suele vuelve a mentir, sino que su firmeza ante países que considera que violan los Derechos Humanos es muy elástica:
Sánchez se erigió como el gran campeón del mundo antiNetanyahu y anunció que suspendía los acuerdos comerciales con Israel, que es un país que hace mucho negocio con la venta de armas. Una mentira más de Sánchez, España ha seguido comprando material, sobre todo de carácter policial, a Israel. Segunda consideración sobre los escrúpulos morales de Sánchez, a Israel lo convierte en un apestado, pero no ha tenido problema en ir a rendir pleitesía a Xi Jinping o a comprarle el gas a Putin.

Detalló que el presidente trató de colar la operación de tapadillo:
En plena Semana Santa y sin que nadie se enterara, el Gobierno cerró la operación, esa que negaba que fuera a hacer nunca, pero el contrato, publicado en el BOE, fue difundido el mismo día que Sánchez anunciaba el aumento del gasto en defensa. Sumar, IU y Podemos montaron en cólera porque Sánchez se había comprometido a lo contrario y exigieron una rectificación.
Incluso Interior no estuvo de acuerdo con cancelar el contrato por el perjuicio económico que acarrearía, pero Sánchez prefirió no cabrear más de la cuenta a la formación de Yolanda Díaz:
El departamento de Marlaska, Interior, justificó el asunto alegando el perjuicio económico grave de suspender un contrato. Pero, finalmente, Sánchez, por salvar la estabilidad de su gobierno, ha dado la orden de anular el contrato. Y el perjuicio económico sigue ahí. Pero ese perjuicio económico de 6 millones y medio de euros lo va a pagar usted.

