En La Retaguardia de este martes 20 de mayo, Eurico Campano analiza con Mario Garcés la alerta antiterrorista que ha lanzado Estados Unidos sobre España.
Y es que la Administración de Donald Trump ha encendido todas las alarmas al incluir a España en su lista de países donde los ciudadanos estadounidenses deben «extremar la precaución» debido al riesgo de atentados terroristas y disturbios civiles. El Departamento de Estado norteamericano ha elevado a nivel 2 (sobre 4) su alerta de viaje para nuestro país, una decisión que ha generado preocupación tanto en el sector turístico como en las autoridades españolas.
La actualización, realizada el pasado 12 de mayo, sitúa a España en el mismo nivel de alerta que Alemania, aunque en el caso español se añade la advertencia específica sobre posibles disturbios civiles. Esta medida llega en un momento especialmente delicado para el turismo español, que esperaba recuperar este verano las cifras récord de visitantes norteamericanos alcanzadas en 2024, cuando más de 85 millones de turistas visitaron España.
Los detalles de la alerta
El aviso emitido por Washington es explícito: «Grupos terroristas siguen planeando posibles atentados en España. Los terroristas pueden atacar con poca o ninguna advertencia». Entre los potenciales objetivos, el Departamento de Estado menciona «lugares turísticos, centros de transporte como aeropuertos y estaciones de tren, mercados y centros comerciales, instalaciones gubernamentales, hoteles, clubes y restaurantes, lugares de culto e instituciones educativas, parques y grandes eventos deportivos y culturales».
La alerta no especifica amenazas concretas ni inminentes, pero sí establece una serie de recomendaciones para los ciudadanos estadounidenses que decidan viajar a España:
- Evitar manifestaciones y aglomeraciones
- Mantener la conciencia del entorno
- Seguir las instrucciones de las autoridades locales
- Consultar los medios locales para estar al tanto de las últimas noticias
- Inscribirse en el Programa de Inscripción para Viajeros Inteligentes (STEP)
Los niveles de alerta que maneja Estados Unidos para sus ciudadanos se dividen en cuatro categorías: azul (precauciones normales), amarillo (mayor precaución), naranja (reconsiderar el viaje) y rojo (no viajar). España ha pasado del nivel 1 (azul) al 2 (amarillo), lo que implica un deterioro significativo en la percepción de seguridad.
Contexto de la decisión
Esta decisión de la Administración Trump se produce en un contexto de creciente preocupación por la amenaza terrorista a nivel global. España mantiene desde 2015 su propio nivel de alerta antiterrorista en 4 sobre 5, un umbral que refleja el peligro constante que perciben las autoridades españolas.
Según datos del Ministerio del Interior consultados por diversos medios, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han detenido a más de 50 presuntos terroristas islámicos en lo que va de 2025, una cifra que supera cualquier registro desde los atentados del 11-M en 2004. Esta intensificación de operaciones antiterroristas podría estar relacionada con la decisión estadounidense.
Cataluña parece ser una de las zonas que más preocupan a los servicios de inteligencia. Fuentes policiales citadas por algunos medios califican Barcelona como «la ciudad española más amenazada», tras operaciones como la detención en abril de tres individuos acusados de difundir propaganda de DAESH.
Impacto en las relaciones bilaterales y el turismo
La decisión de Washington ha caído como un jarro de agua fría en el Gobierno español, que aún no ha emitido una respuesta oficial. Fuentes diplomáticas consultadas señalan que se están manteniendo contactos con la embajada estadounidense para obtener más detalles sobre los motivos concretos que han llevado a esta elevación del nivel de alerta.
El sector turístico español observa con preocupación esta medida, especialmente porque Estados Unidos es uno de los mercados emisores que más ha crecido en los últimos años. Los turistas norteamericanos se caracterizan por un elevado poder adquisitivo y estancias más largas que la media, lo que los convierte en un segmento especialmente valioso.
La Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) ha pedido prudencia y ha recordado que España sigue siendo uno de los destinos más seguros del mundo, con una tasa de criminalidad inferior a la media europea.
Disturbios civiles: el otro factor de preocupación
Además de la amenaza terrorista, el Departamento de Estado norteamericano menciona específicamente los «disturbios civiles» como factor de riesgo en España. El aviso señala que «las manifestaciones son frecuentes» y que «pueden tener lugar en respuesta a problemas políticos o económicos, en días festivos políticamente significativos y durante acontecimientos internacionales».
Esta mención a los disturbios civiles podría estar relacionada con las protestas que se han producido en diversas ciudades españolas en los últimos meses, algunas de ellas con episodios violentos. Las manifestaciones en contra de los propietarios de vivienda, las protestas del sector agrario o los disturbios en Cataluña podrían haber influido en esta percepción.
Precedentes y comparativa internacional
No es la primera vez que Estados Unidos eleva el nivel de alerta para España. Ya lo hizo en 2017, tras los atentados de Barcelona y Cambrils, y en 2019, coincidiendo con la sentencia del Golpe de Estado en Cataluña. Sin embargo, en ambas ocasiones la medida fue temporal y se revirtió en pocas semanas.
Lo que resulta significativo en esta ocasión es que España ha sido incluida en un grupo reducido de países para los que se ha actualizado la alerta este mes de mayo. Junto a España, solo otros siete países han visto elevado su nivel de riesgo: Reino Unido, Alemania, Filipinas, Perú, Tayikistán, Uruguay y Cuba.
En el caso de Alemania, la alerta se centra principalmente en tres ciudades: Berlín, Colonia y Múnich, mientras que para España se extiende a todo el territorio nacional, lo que sugiere una preocupación más generalizada.
Datos curiosos sobre la alerta
Un aspecto llamativo de esta situación es que la alerta ha sido emitida por la administración de Donald Trump, quien regresó a la Casa Blanca en enero de 2025 tras vencer en las elecciones de noviembre de 2024. Durante su anterior mandato (2017-2021), Trump ya mostró una especial sensibilidad hacia las amenazas terroristas y endurecció considerablemente la política migratoria estadounidense.
El Departamento de Estado está actualmente dirigido por Marco Rubio, senador de origen cubano conocido por sus posiciones firmes en política exterior. Rubio ha impulsado una revisión general de las alertas de viaje para ciudadanos estadounidenses, con un enfoque más preciso que su predecesor.
Otro dato interesante es que esta alerta llega justo cuando se cumplen 20 años de los atentados del 11-M en Madrid, lo que ha reavivado en España el debate sobre la amenaza del terrorismo islámico y las medidas de prevención. Las autoridades españolas han realizado en las últimas semanas diversos simulacros antiterroristas en infraestructuras críticas como aeropuertos y estaciones de tren.