Un simple CD falso de Lady Gaga le permitió a un soldado de 22 años, aburrido en Irak, hacer la mayor filtración de la historia de la diplomacia de EEUU. Bradley Manning, destinado en Bagdad, facilitó miles de documentos secretos a Wikileaks entre noviembre de 2009 y mayo de 2010 con un método tan sencillo como bajarse la información a un CD. Su mayor error fue contárselo a un hacker de Internet: Adrian Lamo, de 29 años, revela The Guardian. —How 250,000 US embassy cables were leaked—
«Nadie sospechó nada. Fue extremadamente fácil», le contó el soldadito Manning a su amigo ‘hacker’ por chat.
«He tenido acceso a los servidores 14 horas al días los siete días a la semana durante ocho meses»
«Entraba en la sala de informática con un cd regrabable de música que decía ‘Lady Gaga’, borraba la música y grababa un archivo comprimido con la información secreta. Nadie sospechó nunca nada, y probablemente nunca lo harán»
«Hillary Clinton y miles de diplomáticos del mundo van a tener un ataque cardiaco cuando se levanten un día por la mañana y sepan que el contenido de estos documentos es de dominio público».
Según The New York Times, unos 11.000 documentos estaban clasificados como «secretos»; otros 9.000 estaban considerados como «noforn», es decir, material considerado demasiado delicado como para compartirlo con otros Gobiernos.
A Lamo le entró el miedo en el cuerpo y traicionó a Manning. Le entregó los protocolos de sus chats al FBI en una cafetería Starbucks en Sacramento y el joven soldado fue detenido el 26 de mayo de 2010. En la actualidad se encuentra en una prisión militar en Virginia. Sobre él pesa la amenaza de una pena de 52 años por alta traición. Se había delatado solo.
¿CÓMO LLEGÓ A LOS MEDIOS?
El periódico estadounidense The New York Times obtuvo los documentos confidenciales filtrados ayer por la página Wikileaks del diario británico The Guardian y no directamente del citado sitio web, según el blog The Cutline, de Yahoo News.
El director ejecutivo del Times, Bill Keller, confirmó en un correo electrónico enviado a Cutline que fue The Guardian el que les entregó el material confidencial.
Wikileaks divulgó más de 250.000 cables diplomáticos redactados por funcionarios estadounidenses en embajadas y consulados de todo el mundo y los entregó por adelantado al periódico español El País, The Guardian, el rotativo francés Le Monde y la revista alemana Der Spiegel.
The New York Times también divulgó información exclusiva sobre los mensajes, lo que llevó a creer que había obtenido los documentos directamente de Wikeleaks.
Pero, según trascendió, fue The Guardian el que entregó una copia de los mensajes al Times.
David Leigh, director ejecutivo de la división de investigación de The Guardian, dijo en un correo electrónico a Cutline: «Obtuvimos los cables de WL» (Wikileaks) y «le dimos una copia al NYT» (The New York Times).
El entregar información valiosa a un competidor no es una práctica habitual, pero Leigh explicó en un segundo correo electrónico que las leyes británicas podrían haber frenado la publicación de los documentos mediante un mandamiento judicial si The Guardian actuaba en solitario.
Tanto The New York Times como The Guardian estuvieron entre las publicaciones que obtuvieron copias de documentos confidenciales sobre las guerras de Irak y Afganistán divulgados en los últimos meses por Wikileaks.