"Exclusiva: el verdadero 'topless' de Kate" o "Pechos fuera por Kate", son algunos de los títulos que acompañan a una veintena de imágenes
Tras el topless, el desnudo integral. Kate Middleton y, después, las mofas y burlas. La futura reina de Inglaterra no pasa por su mejor momento, después de que un paparazzi -que pasó tres días encaramado a un árbol- la pillara desnuda en sus vacaciones en un castillo de la Provenza francesa.
Tras el episodio y la aparición de sus reales tetas en las revistas francesas, las denuncias anunciadas por la Casa Real británica no parecen ayudar demasiado. La ironía sobre su caso se está desbordando en internet.
LA PRINCESA ESTÁ TRISTE
Kate debe estar padeciendo lo suyo, y más después de que sus ‘fans‘ intenten levantarle el ánimo a base de jolgorio e ironía. Mal asunto.
Los usuarios de internet y las redes sociales, no han permanecido ajenos al escándalo y para quitar hierro al asunto se han puesto manos a la obra emulando a la Duquesa de Cambridge, eso sí, a su manera.
Las particulares ocurrencias han sido colgadas en la red, como ya ocurriera en el caso del príncipe Harry y las instantáneas de sus vacaciones locas en Las Vegas.
MILITARES EN PELOTAS
Si los militares iniciaron el movimiento ‘Un saludo desnudo para Harry’ en Facebook, instando a la gente a posar sin ropa «cubriendo sus joyas de la corona»; en esta ocasión, Twitter y Tumblr no han dudado en salir en defensa de la mayor de las Middleton.
«Exclusiva: el verdadero ‘topless’ de Kate» o ««Pechos fuera por Kate«, son algunos de los títulos que acompañan a una veintena de imágenes, que pretenden «solidarizarse con la futura reina en sus tiempos de necesidad».
Distintos posados o robados masculinos sin camiseta y con una máscara de Middelton proliferan en la red.
LA POLICÍA NO ES TONTA
Según informa el diario The Sun, la policía cree que el paparazzi que realizó las fotografías del topless de Kate Middleton recibió ayuda desde el interior del hotel donde pasaron sus vacaciones los Príncipes.
Los trabajadores del Chateau d’Autet, en la Provenza, son todos sospechosos de ser cómplices del fotógrafo.
Las investigaciones se centran ahora en saber quién alertó al fotógrafo de que la pareja se hospedaba en el lujoso hotel y averiguar desde donde hizo las fotografías.
La policía investigará el lugar desde donde se tomaron las imágenes para buscar pistas y rastros del ADN del paparazzi.
«Oficialmente, la escena del crimen son el castillo y sus alrededores”, explican a The Sun fuentes de la investigación, “este tipo de investigación implica entrevistar a tantos testigos potenciales como sea posible».