"Muy de vez en cuando me llega alguna de sus miserias, que seguro han de ser mucho más"
Cualquiera podría pensar que con el cambio de año, los personajes mediáticos del circo español podrían tranquilizarse y pensar en iniciar con borrón y cuenta nueva 2014. No obstante, resabiados los actores principales de las tertulias mediáticas del panorama nacional, tratan de mantenerse lo máximo posible en el candelero. La red social de información y opinión Twitter es, precisamente, un escaparate permanente para permanecer visible.
La primera riña internauta del año encuentra a dos protagonistas controvertidos. El polémico periodista Hermann Tertsch y el polifacético y no menos controvertido Máximo Pradera. Ambos contrincantes son compañeros habituales en algunas de las tertulias políticas de 13TV, especialmente en ‘El Cascabel’ y en ‘De hoy a mañana’.
Todo empezó en el mismo día de Año Nuevo, con Máximo Pradera acordándose de Tertsch, sin venir a cuento, por un artículo de Luis María Anson que hacía referencia a Javier Pradera, el fallecido progenitor de Máximo, en el mismo primer párrafo de su columna en el diario ‘El Mundo’ con fecha de 23 de diciembre de 2013 —Navidad para la izquierda del caviar y del ‘domperingon’–:
«Al comienzo de la Transición, las mesnadas de la izquierdona del caviar y el domperignon, acaudilladas entonces por el inolvidado Javier Pradera, se regocijaban escribiendo que la superstición navideña no duraría ni dos años. Para ellos era una cuestión de hecho la paganización de la Navidad. Consiguieron, en un alarde de sectarismo, que en las iluminaciones callejeras no se hiciera la menor alusión a lo que se conmemoraba. Dieron también por desterrados los belenes, no solo en las instituciones públicas sino también en los hogares. Más tarde, siguiendo al pie de la letra las instrucciones de Lenin, Delia Piccirilli preparó unas cabalgatas de Reyes en las que la historia del nacimiento del niño Jesús se equiparaba con cuentos de ficción para que los niños, al crecer, dieran la misma consideración al relato evangélico que a las aventuras de Blancanieves o de Antoñita la Fantástica».
Apenas una mención, gratuita y quizás innecesaria, eso sí, al padre de Máximo Pradera, Javier, quien fuera miembro fundador del diario ‘El País’, y que desapareciera tristemente el pasado 2011.
El tuit en cuestión de Máximo Pradera, publicitaba el enlace a la opinión de Ansón, añadiendo, eso sí, una referencia sorprendente a Hermann Tertsch:
Incluso después de muerto, Luis María Ansón sigue obsesionado con Javier Pradera. Está aún más enfermo que Tertsch. http://t.co/WhfptsO8yT
— Max Pradera (@maxpradera) enero 2, 2014
La respuesta entonces del aludido Hermann Tertsch no se hizo esperar. A través de la misma red social, y también sin mencionar directamente como el propio Pradera (ninguno hizo uso de la arroba):
El nene del pobre Pradera sigue hundiendo su apellido en el lodo. Ahora nos llama enfermos a Anson y a mi. El que sólo vive del papá muerto.
— Hermann Tertsch (@hermanntertsch) enero 2, 2014
Pocos minutos después, Tertsch incidía en la referencia a Max Pradera mediante la respuesta a la felicitación navideña de uno de sus seguidores en dicha red Twitter:
«Muy de vez en cuando me llega alguna de sus miserias, que seguro han de ser mucho más. De esas pocas contesto a alguna».
