Un informe de fiscalización del Tribunal de Cuentas ha sacado a la luz que el Instituto Cervantes, encabezado por Víctor García de la Concha, contrató «a dedo» a personal directivo y 22 directores de centros en el exterior durante el ejercicio de 2012, según informa este jueves el Economista.es.
Según el citado informe, no queda constatado que la contratación de estos directivos «se acomodora a los principios de mérito y capacidad dado ya que no han quedado documentadas las valoraciones otorgadas a los candidatos respecto a los requisitos exigidos en la convocatoria pública», por lo que no se ha cumplido uno de los artículos del Estatuto Básico del Empleado Público que establece que: «la designación del personal que desarrolla funciones directivas profesionales en las Administraciones Públicas atenderá a principios de mérito y capacidad y a criterios de idoneidad, y se llevará a cabo mediante procedimientos que garanticen la publicidad y concurrencia».
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