El diario podemita 'Público' hace el ridículo: niega que exista el ‘Irángate’ de Podemos y dice que todo son unos euros que cobraba el 'pobre' Pablo Iglesias
Dentro de unos días, el Pleno del Congreso tendrá que elegir a los seis diputados que tendrán acceso a secretos oficiales y, por tanto, a controlar el Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
Por lógica, siguiendo la costumbre y aplicando la ley, serán portavoces de PP, PSOE, Ciudadanos, Podemos y dos más salidos de las otras seis formaciones que han logrado suficiente número de escaños para contar con grupo propio en la Cámara Baja (Los de Podemos no se ‘Irán’ de rositas: el régimen iraní les aflojó un pastizal por un documental).
Y ahí, según uno de los más relevantes mandos de la Policía española, que lleva en la lucha antiterrorista y la contrainformación más de dos décadas, surge la acuciante incógnita (Pablo Iglesias presume de sus negocios con Irán en un vídeo que Podemos trata de borrar):
«Irán es una potencia extranjera y durante décadas ha aparecido detrás de algunos de los atentados terrotistas más infames. Lleva años financiado en secreto a Pablo Iglesias y a los que han terminado conformado la dirección de Podemos. ¿No parece lógico que haya introducido su propio topo en la organización?».
Hecha la pregunta de forma retórica, el alto responsable policial, responde en voz alta:
«Pues desde ahora, si no se toman medidas, los ayatolás iraníes tendrán en el Congreso de los Diputados y en una posición privilegiada a alguien con acceso a datos claves en materia antiterrorista, lucha contra el yihadismo y medidas especiales; podrá saber casi todo lo que hacemos nosotros, la Guardia Civil y el CNI y además cómo lo hacemos».
Los indicios son abrumadores, a pesar de los patéticos esfuerzos de medios y periodistas podemitas para minimizar la gravedad del caso.
El diario Público -creado por el millonario Jaume Roures para dar respaldo a Zapatero y en cuya web se emite el programa La Tuerka presentado y dirigido por Pablo Iglesias- afirma sin sonrojarse que los millones de euros transferidos por el Gobierno de Irán se reducen a que Pablo Iglesias cobra 700 euros por presentar cada programa de La Tuerka.
Añade que el informe elaborado por la Udef «no existe».
Un antiguo alto cargo del Gobierno venezolano que colabora actualmente con la DEA, la agencia antidroga estadounidense, facilitó información a la Policía Nacional que demostraría que el régimen chavista y las autoridades de Teherán acordaron utilizar Hispan TV para dirigir la inyección de fondos en Podemos. Esta información llegó a España en verano.
La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional ya ha remitido a la Fiscalía y al Ministerio de Hacienda toda la documentación que obraba en su poder sobre la investigación de la presunta financiación ilegal de Podemos con fondos inyectados por Irán.
Las conclusiones del informe, bautizado como ‘PISA’ (por Pablo Iglesias Sociedad Anónima), fueron entregadas el 4 de noviembre por la Dirección General de la Policía a la Comisaría General de Policía Judicial, la sección en la que está encuadrada la UDEF.
Tras analizar el contenido del mismo, la UDEF ha decidido en los últimos días dar traslado a la Fiscalía para que centralice las investigaciones y ponga en marcha un procedimiento penal, siguiendo así el protocolo que se efectúa en cualquier otro caso en la que la Policía detecta indicios de delito.
La documentación ya ha sido remitida también por la UDEF a la Agencia Tributaria para que investigue la facturas emitidas por la productora de Pablo Iglesias, Con Mano Izquierda, y la contabilidad Hispan TV, canal iraní en España.
Como revela El Confidencial este 16 de enero de 2016, los datos que maneja la Policía concluyen que Podemos habría recibido a través de las empresas audiovisuales que administra en España el iraní Mahmoud Alizadeh Azimi más de cinco millones de euros aportados directamente por el régimen de Teherán.
La sociedad 360 Global Media, una firma del sector audiovisual montada de la nada por Alizadeh Azimi en abril de 2012, juega un papel fundamental en todo este entramado. 360 Global Media ha declarado unos ingresos totales desde entonces de 7,2 millones de euros.
La mayor parte de esa facturación es fruto de la emisión en España del canal público iraní en castellano Hispan TV.
El iraní Azimi también controla otras dos mercantiles que habrían recibido igualmente dinero de su país con el supuesto objetivo de financiar la generación de contenidos sobre el país persa: Producciones Audiovisuales Press TV y Producciones Audiovisual Hispan TV.
El dirigente policial que nos alerta sobre el riesgo que entraña dar acceso a un representante de Podemos en la Comisión de Secretos oficiales subraya que esos fondos también fueron utilizados por Irán para sufragar la creación de Podemos y su actividad ordinaria durante sus primeros meses de vida.
Cumpliendo órdenes de Teherán, 360 Global Media y el resto de empresas del conglomerado de Alizadeh Azimi se dedicaron a inflar de forma sistemática las facturas que abonaron desde 2013 a sociedades de dirigentes de Podemos por la supuesta prestación de servicios audiovisuales para canalizar de esa forma ayudas irregulares al partido.
La productora de televisión controlada por Pablo Iglesias y otros dirigentes de Podemos habría inflado hasta un 1.760% las facturas que emitía al canal iraní Hispan TV para camuflar por esa vía la inyección en el partido de dinero de Teherán, según han confirmado a este diario fuentes policiales y también de la propia cadena.
La supuesta asociación sin ánimo de lucro Con Mano Izquierda, creada por Iglesias para realizar el espacio de debate Fort Apache, habría recibido del canal iraní 15.000 euros por cada edición del programa, un precio incompatible con los 800 euros que Hispan TV pagaba en la misma época a profesionales del periodismo por la producción de programas idénticos.
En total, Pablo Iglesias, Iñigo Errejón, Juan Carlos Mondedero, sus ‘cuates’ y sus sociedades satélite habrían cobrado del conglomerado en torno a cinco millones de euros.
LAS ‘EXPLICACIONES’ DE PABLO IGLESIAS
«Yo no soy idiota», se justificaba Pablo Iglesias cuando se le recordaba su doble moral de azote de la casta y paniaguado de los sátrapas iraníes.
Al líder de Podemos no le parecía ningún despropósito que alguien que aspiraba a gobernar España estuviera a sueldo de gente como los ayatolás y financiando su programa ‘Fort Apache’ en Hispan TV.
Los podemitas, que presumen de tener los bolsillos transparentes, nunca dieron explicaciones de las cantidades ingentes de dinero que recibían de los déspotas iraníes, hermanados con los chavistas venezolanos, otra dictadura patrocinadora de Podemos.
No fueron pocas las veces que Iglesias, Iñigo Errejón y Juan Carlos Monedero estuvieron contra las cuerdas por los escándalos de sus productoras audiovisuales.
El primero de ellos salió a la luz cuando se supo que Iglesias pagaba en negro a sus trabajadores de la productora Con Mano Izquierda y a éstos les aconsejaba por correo no preguntar de dónde venía el dinero». —Hacienda le puede cortar la coleta a Pablo Iglesias por sus tejemanejes con la productora—
Los pagos en negro a la productora fueron denunciados por el empresario Enrique Riobóo, fundador y propietario del 80% de Canal 33 y antiguo socio del secretario general de Podemos, con el que tenía un acuerdo comercial para emitir La Tuerka en su televisión. –-Los chanchullos con su productora acorralan a Pablo Iglesias—
Pablo Iglesias justificó que la dictadura iraní financie su carrera política, a través de Hispan TV, porque «a los iraníes les interesa difundir un mensaje de izquierdas en España y América Latina para desestabilizar a sus adversarios».
Según el informe de la UDEF:
«Pablo Iglesias viene a reconocer un golpe de Estado encubierto financiado por los Gobiernos de Irán y Venezuela. El dinero serviría para hacer apología de la izquierda más radical con el fin de desestabilizar a los gobiernos occidentales, logrando apoyos de fuerzas políticas de dichos países (…) En España esta opción es Pablo Iglesias y su núcleo duro, todo lo cual ha fructificado en la creación de Podemos».
«Los integrantes de este núcleo duro pretendieron en un principio hacerse con el control de Izquierda Unida, y sólo ante la imposibilidad de llevar a cabo esta opción decidieron la creación de un nuevo partido político aprovechando la crisis política que, unida a una de las mayores crisis económicas que ha vivido España en los últimos años, ha creado el caldo de cultivo imprescindible para el nacimiento de opciones populistas que se han ganado el apoyo de un sector importante de la sociedad española».
