El pasaje de las chicas agredidas en Cataluña por animar a la Selección, ha traido consigo una serie de daños colaterales, como por ejemplo el enfrentamiento claro, directo y duro entre el periodista Carlos Herrera y la política y tertuliana Beatriz Talegón —Los jugadores de la Selección y los directivos ya deben estar preparando algo para las chicas agredidas… ¿no?–.
Primero fue la ex del PSOE, que se preguntaba en Twitter sobre la expresión que había utilizado el comunicador de la Cadena COPE para llamar la atención a las feministas que no se habían pronunciado en contra de la agresión, de modo que Herrera procedió a contestarla. Lo hizo, claro, con contundencia y dureza en contra de la siempre controvertida política, dedidaca más al salseo mediático que a la propia acción a la que supuestamente se dedica —Carlos Herrera pide un «desfibrilador de tontos» para Beatriz Talegón–:
A ver, Beatriz Talegón. ¿Qué que quise decir con ‘calladas como putas’? Es una expresión coloquial. ¿Por qué no te preocupas más por estas chicas, mente preclara de Occidente?
De modo que la última en contestar para seguir engordando la bola ha sido la propia Talegón, a través de su columna en el portal OkDiario, disparando contra Herrera, o como ella le llama, ‘la musa de las ondas radiofónicas de la derecha rancia’:
El esperpento, principalmente protagonizado por la musa de las ondas radiofónicas de la derecha más rancia: Carlos Herrera. En su púlpito matutino no perdió un minuto en tergiversar y manipular la información, pretendiendo así crear bandos, politizar y sumar más violencia a la ya existente.
Su versión de los hechos se empeña en señalar a los agresores del fin de semana como si fueran los mismos que «los del barrio de Gracia». ¿Qué pretende este señor haciendo tal alusión, cuando aún a día de hoy se desconocen los datos que puedan identificar a los agresores?
La verdadera intención del sucesor de Losantos era pasar al siguiente nivel: preguntar por las feministas catalanas y su condena ante los hechos. Dentro de la coherencia de su línea argumental, no pierde ocasión para expresar todos los adjetivos peyorativos imaginables y terminar poniendo el broche de oro: «Están calladas como putas».
Llega ahí Talegón, más conocida últimamente por meter la pata en Twitter o por ser expulsada de televisiones, a lo que de verdad le importa —Las cinco ‘talegonadas’ mediáticas: lo mejor del repertorio de meteduras de pata de Beatriz Talegón–:

Este argumento le sirvió al amante del vino y los toros para montar todo su sermón en base a la supuesta defensa de las mujeres. Todo muy vehemente, muy comprometido, aunque no con la cuestión de género sino más bien con la identidad española y catalana […] Un defensor de la mujer jamás terminaría su discurso con la nefasta expresión citada -«como putas»- aludiendo al supuesto silencio de algunas mujeres.
Un machista recalcitrante que no desaprovecha la oportunidad para insultarnos a quienes no pensamos como él en este país de pandereta, insultando y faltando al respeto continuo del «prójimo y las prójimas» viene a recibir unos seis millones de euros…

