Este 6 de noviembre de 2018 el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo dio un tortazo a toda España, sentenciando en contra de la Audiencia Nacional y a favor de Otegi y otros cuatro exetarras, por considerar, por una serie de comentarios, que la jueza Murillo no era parcial a la hora de juzgarle. Chani rebaja la euforia de Ignacio Escolar con el fallo de Estrasburgo a favor del etarra Otegi: «¿Acaso cuestionas que España es un Estado de Derecho?»
Hay un defecto de forma, por las malas artes viscerales y estomacales de la jueza Murillo, pero eso no exime a Otegi de absolutamente nada ni mucho menos le convierte en un hombre de paz como quiere dar a entender la izquierda abertzale y radical.
En cualquier caso este asunto ha volteado el corazón de los españoles azotados por la violencia de ETA, por los asesinatos y el terror, y da la oportunidad de sonreís a los que fueron verdugos, los apoyaron o jamás llegaron a condenarlos. No es para menos que los verdaderos demócratas españoles echen pestes de Estrasburgo, y más cuando no es la primera vez -doctrina Parot- que unos señores desde sus despachos ejecutan este tipo de disparates.
Varios periodistas y políticos del panorama han estallado desde sus respectivas cuentas de Twitter:
El señor @ArnaldoOtegi no se pudo presentar a las Elecciones una vez por su enésima sentencia por terrorista o cómplice de los terroristas, digan lo que digan los imbéciles de Estrasburgo.
Gregorio Ordóñez no se presentará nunca: sus colegas le asesinaron. Y él se calló.
— Antonio Naranjo (@AntonioRNaranjo) 6 de noviembre de 2018
Estrasburgo, los mismos que pusieron en la calle a etarras y violadores, dice que Otegi no tuvo un juicio justo. Los únicos que no tuvieron justicia aquí son los más de 800 asesinados y miles de amenazados y secuestrados por ese terrorista y sus compañeros de ETA https://t.co/MqcEQOBdj8
— Santiago Abascal (@Santi_ABASCAL) 6 de noviembre de 2018
La sentencia de Estrasburgo sobre Otegi no se pronuncia sobre el fondo de ningún asunto. No cuestiona la democracia en España. Ni afirma que se hayan vulnerado Derechos Humanos del dirigente etarra. Recoge una causa de recusación que el propio Tribunal Supremo reconoció en 2011.
— María Jamardo (@MariaJamardoC) 6 de noviembre de 2018
Pues no, Otegi. La sentencia aprecia que pudo haber imparcialidad en una jueza que formaba parte del tribunal. La constatación de que Espańa es una democracia plena es que reconoce y respeta los derechos de tipos como tú que no ha dejado de defender y justificar el terrorismo. pic.twitter.com/WPWzJHflEU
— Rosa Díez (@rosadiezglez) 6 de noviembre de 2018