El cantante Mikel Izal y el cómico y presentador de radio y tele, Castelo, llevan unas horas pasándolo muy mal por culpa de una caza de brujas originada contra ellos en redes sociales por ser nada menos que unos acosadores, casi pederastas. Eso sí, ni una sola denuncia donde corresponde y las pruebas aportadas en Twitter e Instagram son «auténtica basura».
Esto último lo dice el periodista Juan Soto Ivars, que sabe bien de apaleos públicos en las redes sociales porque se dedica a analizarlos, y por eso debería saber bien que ahora le toca a él. La primera en saltar, cómo no, un avatar pagado por Ignacio Escolar, Barbijaputa, conocida en la red como una auténtica caricatura mala del feminismo.
La prueba más brutal aparecida en las redes este 9 de mayo de 2018 contra el exitoso cantante de un grupo de indie es sintomática: para una mínima parte de exaltadas del feminismo, ahora intentar ligar -con más o menos gracia- es directamente acoso:
Pues lo voy a decir. Lo que se le está haciendo al vocalista de Izal es propio de la inquisición. Llamarle «acosador» por este mensaje es trivializar el acoso hasta el infantilismo. pic.twitter.com/53JXicRFq5
— PabloMM (@PabloMM) 9 de mayo de 2018
Contra Castelo directamente lo que hay son relatos publicados por parte de supuestas víctimas de haber tratado sobrepasarse con ellas, incluso de algunas se dice que son menores. También se han publicado algunas capturas de mensajes privados que tampoco servirían como prueba de ningún delito salvo el de ligar de pena.
Este es Antonio Castelo, @SrCastelo, 35 años. Estas son algunas de las conversaciones con chicas muy jóvenes, algunas menores, que se están haciendo públicas. Va hilo ? pic.twitter.com/Zmy0Gl5dNX
— ? (@teclista) 9 de mayo de 2018
Tanto Castelo como Izal han respondido mediante sendos comunicados y participando en algunos medios respondiendo con contundencia a las acusaciones que han quemado su imagen en las últimas horas. Ambos tomarán las acciones legales que consideren oportunas, y no lo harán en Twitter precisamente.
SOTO IVARS LLEGA… ¿AL RESCATE?
Este 10 de mayo de 2018 parecía que se podían calmar un poco las aguas, pero ha salido entonces el artículo de Juan Soto Ivars en El Confidencial para ponerlo todo patas arriba. Además, lo ha apoyado con un comentario polémico en su Twitter:
Con el asunto de los mensajes ligando de Izal y Castelo yo no puedo dejar de repetirme esta pregunta:
¿Por qué de pronto estamos fingiendo todos que no existen las zorras?— Juan Soto Ivars (@juansotoivars) 10 de mayo de 2018
El artículo en cuestión de Soto Ivars deja muy claro una reflexión que debería hacerse ‘la manada feminista’, o más que ellas, el resto de feministas, hombres y mujeres, que no caen en esa penosa radicalidad:
A Izal, cantante de moda, se le han subido las grouppies a las barbas y le están pegando fuego en la red social. Lo llaman acosador y presentan pruebas. Las pruebas son basura. Mensajes privados en los que, básicamente, Izal las invita a follar. Los leo, curioseo, y os diré lo que pienso aunque arda Troya: lo último que hace Izal (en esos mensajes) es acosar. No me jodáis.
[…]
Pues vale. No dejo de preguntarme una cosa. ¿Por qué ha desaparecido el término ‘groupie’ desde que empezaron a pasar por la picadora tipos como Izal? ¿Nunca han existido las zorras? ¿Me lo estáis diciendo en serio? Juradme que nunca existieron y me tragaré todas mis palabras. Decídmelo en serio y mandaré a tomar por saco al violador Izal. Si han de cambiar las reglas del juego lo acepto. Pero si vamos a decir la verdad, empecemos diciendo toda la verdad
Pues bien, como era de esperar, Barbijaputa y demás tropa de feministas radicales que estaban acusando al cantante Izal de cosas tan terribles como seguir a muchas chicas en Instagram, han salido a apalear en el juzgado de Twitter al periodista Soto Ivars, su nuevo enemigo a muerte.
Soto Ivars, el «feminista» pic.twitter.com/3JTmx8kesD
— Barbijaputa (@Barbijaputa) 10 de mayo de 2018
Soto Ivars Imbécil
— Arruinador de Alegrías – Weltschmerz (@nichtmitmachen) 10 de mayo de 2018
Que igual, y esto sólo es especulación, Soto Ivars se está haciendo la cama para cuando salga mierda de él.
— Rose Wess (@Rosewess) 10 de mayo de 2018
— Rizzo (@tanqueraytwelve) 10 de mayo de 2018
Dicho todo esto, si Castelo, Izal, Soto Ivars o quien sea, ha cometido el más mínimo acoso, que lo denuncien. Y entonces, que el peso de la Justicia, de un tribunal sensible con la violencia de género, caiga con todo su peso sobre ellos.