Al final, tras la guerra de dimes y diretes entre el Barça y el representante de Ibrahimovic -Mino Raiola-, hubo fumata blanca entre Sandro Rossell y Adriano Gallini, consejero delegado del Milan. El delantero sueco, que no viajó a Santander para el arranque liguero, militará en el conjunto rossonero para las próximas cuatro temporadas tras una especie de compra aplazada. Las cifras del préstamo-acuerdo es de marcharse al Milan con la obligación de compra por unos 24 millones de euros el 1 de julio de 2011, según informó su club de destino. El delantero, que costó al Barça la pasada campaña 42 millones de euros más Eto’o (unos 70 millones de euros en total), cobrará sus casi 12 millones de euros brutos por campaña pagados íntegramente por su nuevo club (de 9 netos pasará a ocho netos en Italia). [Las mejores jugadas de Ibrahimovic]
Se pone punto y final a uno de los culebrones del verano con el colofón entre el cruce de declaraciones Ibrahimovic-Raiola-Guardiola. El delantero se despachó tras el Joan Gamper con unas declaraciones en las que aseguró a la prensa italiana que Guardiola no le quería y que sólo «habló con él dos veces en los últimos 6 meses». Hoy también se despachó con un «Guardiola es el filósofo que ha roto mi sueño de estar en Barcelona». El técnico le respondió tanto a él como su representante que sus razones tenía, y que él era quien mandaba en el vestuario azulgrana.
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