Los filósofos Fernando Savater y Gustavo Bueno; los escritores María Dueñas, Luis Alberto de Cuenca, Benjamín Prado y Juan Bonilla; el cineasta José Luis Garci, el dramaturgo Albert Boadella y otras personalidades de la Cultura y las letras se han sumando a un escrito titulado ‘Contra la quema de libros …
También se han adherido al manifiesto los escritores Luis Racionero, Roberto Montero Glez, Miguel Dalmau y Álvaro Bermejo, el poeta Jesús Munárriz, además de los periodistas Silvia Grijalba, Jesús González Green …
CONTRA LA QUEMA DE LIBROS
Quienes suscribimos el presente Manifiesto estamos horrorizados ante las dimensiones y el tono de la campaña de insultos y persecuciones que se ha desatado contra el escritor Fernando Sánchez Dragó a raíz de la publicación del libro Dios los cría… en el que se recogen sus conversaciones con el dramaturgo Albert Boadella.
Resulta incomprensible que se desate semejante odio hacia un escritor por haberse referido, de forma por lo demás literaturizada, a un hecho inequívocamente amparado por la ley: haber mantenido algún atisbo de relación sexual con menores que superan una determinada edad y que actúan con su pleno consentimiento.
Resultaría ello de todo punto incomprensible si no fuera que otros escritores han relatado literariamente sus experiencias con menores, y nunca se había producido en España semejante reacción.
Una sola explicación se impone por consiguiente. Lo que menos importa es el asunto que ha dado lugar al «escándalo».
Ello sólo constituye un pretexto para arremeter contra un escritor que muchos detestan por profesar ideas que se apartan radicalmente de los valores «políticamente correctos» que pesan hoy sobre nuestra sociedad.
Y esto es lo intolerable, lo escandaloso. Es contra ello -contra ese ataque a la libertad de expresión- contra lo que nos alzamos vigorosamente al tiempo que expresamos nuestra solidaridad con el escritor cuyos libros se pide que sean quemados en la hoguera.
O retirados de circulación -lo cual equivale exactamente a lo mismo, pero las llamas no se ven.