El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, anunció hoy en San José que mañana sobrevolará la zona del litigio limítrofe entre Costa Rica y Nicaragua, y luego se reunirá de nuevo con la presidenta costarricense, Laura Chinchilla.
Insulza dijo en conferencia de prensa, después de reunirse con el canciller costarricense, René Castro, que viajará a la zona del lado costarricense tal como lo hizo hoy del lado nicaragüense durante una visita a ese país, donde se reunió con el mandatario Daniel Ortega.
«Estamos buscando posibles soluciones, estamos trabajando en ellas», afirmó Insulza, quien dijo que no comentaría sobre las conclusiones de su visita a ambos países, ya que lo hará el martes ante el Consejo Permanente de la OEA.
Sin embargo, matizo que «hay que demarcar bien la frontera», ya que al igual que hay «partes muy claras», existen otros «puntos que hay que afinar».
Explicó que su mediación busca ser «un aporte constructivo a la tranquilidad de la región» y subrayó que la OEA no le dirá a los dos países cómo delimitar claramente la frontera.
«Nuestra tarea no es fijar la frontera. No voy a decir yo por donde pasa, esa es tarea de los dos países con asistencia de quienes ellos dos acuerden», expresó.
Por su parte, el canciller de Costa Rica, René Castro, explicó que mantuvo con Insulza una «sesión de trabajo informativa que será complementada mañana con una visita a la zona en la frontera costarricense y luego con una reunión con la presidenta Chinchilla».
«Hemos avanzado en detalles técnicos, hemos tenido discusiones para afinar conceptos y aclarar preguntas», comentó.
Después de la cita con Chinchilla, Insulza concluirá su labor de mediación y retornará a Washington para elaborar el informe que presentará el martes.
Costa Rica denunció el pasado miércoles ante el Consejo Permanente de la OEA que el Ejército de Nicaragua instaló un campamento militar en territorio costarricense como parte del dragado que lleva a cabo Managua en el fronterizo Río San Juan, al tiempo que exigió la salida de esas fuerzas.
En un primer encuentro, el sábado, la presidenta Chinchilla advirtió a Insulza que si el organismo continental no resuelve con urgencia el litigio con Nicaragua, su país está dispuesto a elevar el asunto ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
Nicaragua ha negado haber invadido territorio de su país vecino y alega que sus tropas permanecen en un sector de la soberanía nicaragüense, además de defender el dragado de la vía fluvial.
