WASHINGTON, 7 (Reuters/EP)
El miembro de la Cámara de Representantes Paul Ryan, republicano, ha proclamado la intención de su partido de bloquear siempre que puedan los fondos necesarios para aplicar la reforma sanitaria de los demócratas y el presidente estadounidense, Barack Obama, un proyecto aprobado por consenso en el Congreso actual, aún controlado por los demócratas.
Sin embargo, el propio Ryan ha reconocido que la derogación de la ley como tal tendrá que esperar al menos hasta las elecciones presidenciales de 2012, ya que Obama cuenta con poder para vetar cualquier iniciativa legislativa.
«Esta ley es un descarrilamiento fiscal y económico para nuestro país y para el sistema de atención sanitaria en sí mismo», afirmó Ryan en una entrevista en la cadena de televisión Fox News. «Vamos a hacer todo lo que podamos para intentar revocar y reemplazar esto. Y, finalmente, pienso que en 2013, se harán las cosas bien», aseveró.
Otro congresista republicano, el senador Mitch McConnell explicó que están ya trabajando en localizar las partes del proyecto cuya financiación está aún sujeta a aprobación. «Volveremos sobre esta cuestión una y otra vez. El pueblo americano espera que lo hagamos», dijo en declaraciones a la cadena CBS.
Uno de los integrantes del Tea Party ultraconservador, el senador republicano James DeMint, aseguró que estas negativas a la concesión de fondos son sólo el primer paso para su derogación. «La mayoría de los aspectos de este nuevo Obamacare (unión de Obama y ‘health care’, atención sanitaria) no se van a aplicar hasta dentro de dos años, así que es muy realista creer que podemos retrasar su implementación y reemplazarla para 2012», declaró DeMint en la NBC.
Las elecciones legislativas parciales del pasado 2 de noviembre han propiciado el control republicano de la Cámara de Representantes, pero los demócratas han logrado continuar controlando la cámara alta, el Senado.
