En 1963, un imberbe Bob Dylan lanzaba un aviso a quienes se resistían a la revolución que se avecinaba: «Mejor que empecéis a nadar u os hundiréis como una piedra». Un consejo que, para muchos, podría aplicarse la maltrecha economía española para salir del atolladero: como en aquella canción, los tiempos están cambiando …
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