Otra vez Messi le hizo el lío al sistema defensivo madridista. Su libertad de movimientos atormentó a los centrales, a los pivotes y hasta a Mourinho. Su tarjeta de visita fue un zurdazo tocadito al poste opuesto al que cubría Casillas … El Madrid estuvo muy contemplativo viendo a Xavi, Iniesta y compañía enlazar con Messi y éste inventarse jugadas de gol o semi gol. Su segunda parte fue demoledora, viéndose suelto, sin presión, entregó balones letales a Xavi, Pedro, Villa …
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