Sólo el 1% de las administraciones públicas emplea herramientas de licitación electrónica para ahorrar costes y asegurar la transparencia en los procesos de adjudicación, según un estudio realizado por la consultora de desarrollo e implantación de plataformas de contratación pública electrónica, Grupo Vortal.
La multinacional constata que de las 12.000 entidades y empresas que integran el sector público, apenas unas 200 de ellas hacen uso de las nuevas plataformas de licitación para llevar adelante los procedimientos con rapidez, seguridad, transparencia y ahorro.
Ante el escaso porcentaje de empresas que emplean este sistema, las administraciones españolas se sitúan lejos de los objetivos fijados por la Unión Europea en 2005 en la Declaración de Manchester, por los que los países miembros se comprometieron a que al menos el 50% de estas entidades usarían plataformas electrónicas de contratación pública en 2010.
Asimismo, Vortel estima que tan sólo sustituyendo el sistema de licitación en papel, las administraciones públicas españolas podrían reducir en su conjunto casi un 4% el gasto en contratación de bienes, servicios y obras, lo que supone un ahorro de cerca de 1.500 millones de euros anuales.
Además, la consultora cree que si se emplearan las aplicaciones informáticas instaladas en recursos compartidos se podrían ahorrar unos 1.000 millones de euros adicionales.
El informe señala que este proceso mejoraría la transparencia, puesto que tras entrevistar a 3.000 administraciones europeas, el 92% de los encuestados reconoce que estos sistemas sirven para clarificar la contratación pública.
Por último, el 62% considera que se reduce el tiempo de gestión dado que el plazo medio habitual para la publicación de un procedimiento supera las tres horas frente a los diez minutos de promedio que se tardaría con una plataforma electrónica.
