La Audiencia de Tarragona ha condenado a Pavlo Ch. a 7 años y 9 meses de cárcel, después de que un jurado popular le declarara culpable de golpear hasta la muerte a un anciano de 83 años en los aseos de la estación de autobuses de Tarragona en 2007. Además deberá pagar una multa de 120 euros y una indemnización de 17.500 euros a la familia del fallecido.
El 23 de junio de 2007, sobre las 15 horas, el condenado, un ucraniano de 28 años que residía en Salou, entró en los aseos de caballeros de la estación, donde solo estaba la víctima. Pavlo Ch. había bebido mucho –extremo que se comprobó por los análisis de alcohol en sangre al ser detenido–, tras una grave discusión con su mujer.
Procesado y víctima iniciaron una discusión y Pavlo Ch. empezó a golpear al anciano, arrancándole el bastón y propinándole puñetazos y patadas por todo el cuerpo y golpeándole contra las paredes del lavabo.
Cuando el vigilante del aparcamiento, alertado por varias personas, intentó apartar al condenado, éste se resistió.
Dos agentes de la policía local que acudieron al lugar pidieron al acusado que se identificara, a lo que éste se negó y les escupió. Finalmente, junto a otros dos policías de paisano, lograr reducir al agresor.
La Audiencia le ha condenado por un delito de homicidio con la agravante de abuso de superioridad, un delito de resistencia a la autoridad y una falta de lesiones. Ha tenido en cuenta la eximente incompleta por estar bajo los efectos del alcohol.
