Viendo el Manchester United-Arsenal el otro día, uno se daba cuenta, por la incapacidad una y otra vez de los jugadores de enviar el balón en la dirección deseada, de lo fácil que el Barça hace parecer un deporte que es, en realidad, muy difícil
La peor pesadilla de Arsène Wenger, el entrenador del Arsenal, se hizo realidad el viernes cuando en el sorteo para los octavos de final de la Liga de Campeones le salió el Barcelona como rival…
El juego del equipo catalán es el modelo platónico al que aspira el francés, pero que ahí se ha quedado, como un ideal imposible. El Arsenal sigue siendo, como la temporada pasada, Barcelonalite…
No hay ningún equipo en Inglaterra, ni quizá en Europa, que imite mejor el juego sinfónico del Barcelona. Pero no deja de ser precisamente eso, una imitación…
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