El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha hecho un nuevo llamamiento al líder del PP, Mariano Rajoy, para que se avenga a pactar con el Ejecutivo las reformas estructurales que tiene previsto poner en marcha en 2011 y ha garantizado que su Gabinete se empleará a fondo para sellar acuerdos tanto con el primer partido de la oposición como con el resto de fuerzas políticas. Eso sí, ha reclamado a Rajoy que actúe con «un espíritu un poco más democrático» y teniendo en cuenta el «sentido histórico» que van a tener los cambios que hay que acometer en los próximos meses.
En la rueda de prensa que ha ofrecido en La Moncloa para hacer balance de 2010 y fijar las prioridades del año que viene, el jefe del Ejecutivo ha recalcado que, como viene haciendo desde que llegó al Gobierno, se va a afanar en alcanzar acuerdos con el resto del arco parlamentario hasta el final de una legislatura que no piensa acortar.
«El Gobierno va llevar a cabo todas las reformas, gobernando, cambiando las cosas que hay que cambiar y buscando acuerdos parlamentarios hasta el último minuto de la legislatura», ha sentenciado.
SUMAR AL PP A LA REFORMA DE PENSIONES
Zapatero ha hecho especial hincapié en la conveniencia de que el PP se sume a la reforma de las pensiones que el Gobierno impulsará remitiendo al Congreso un proyecto de ley el próximo 28 de enero. En este contexto, ha aprovechado para replicar al líder del PP quien ha reiterado que respaldará aquellas propuestas del Ejecutivo que considere sensatas.
El presidente considera «positivo» que Rajoy tenga disponibilidad al diálogo. «Me alegro», ha dicho, pero también ha expresado su deseo de que ese tono «constructivo», el mismo que, según ha recordado empleó el máximo dirigente ‘popular’ en el último debate que ambos protagonizaron en el Congreso, no sea sólo fruto del «espíritu navideño».
Tras insistir en que trabajará desde el convencimiento de que se puede «fortalecer el diálogo y el acuerdo», se ha referido específicamente a la importancia que tiene que el PP no se quede fuera de la reforma de las pensiones y siga al lado del Gobierno en todo lo relativo a la reforma del sistema financiero.
«La reforma de las pensiones es sensata, Rajoy lo sabe, igual que sabe que es mejor hacerlo con acuerdo y que hay que mojarse. Espero que se moje», ha apuntado, a la vez que se ha quejado de que todos los líderes políticos reconozcan «en privado» que es necesario reformar el sistema para garantizar su sostenibilidad en el futuro pero luego no reproduzcan ese mismo mensaje públicamente.
UN «OBSTACULO» SALIDO DE LAS URNAS
Por todo ello, en respuesta a los dirigentes del PP que ven en el presidente del Gobierno el «obstáculo» para un acuerdo entre los dos grandes partidos, Zapatero ha pedido a los ‘populares’ «un espíritu un poco más democrático», una petición que ha personalizado en el líder del PP al quejarse sucintamente del tono que usó el pasado martes para referirse al ministro de Fomento, al que llamó «Pepiño», o a la titular de Defensa, a la que se refirió como «la Chacón».
En este contexto, ha recordado que él está al frente del Gobierno por un «resultado electoral» y que democracia implica diálogo. «He hablado con relativa frecuencia con Rajoy y lo voy a seguir haciendo porque la reforma de las pensiones y del sistema financiero son decisivas y voy a hacer todo el esfuerzo para que el PP esté en la toma de esas dos decisiones», ha remarcado.
PACTO AMPLIO O ACUERDOS SINGULARES
Durante su intervención, Zapatero citó también futuras reformas relativas al sector energético, la educación, el Estado autonómico y la aplicación de la reforma laboral. Sobre todas ellas buscará pactos con los partidos políticos, sabiendo que pueden separarles «diferencias ideológicas», pero desde la convicción de que es posible encontrar «»un mínimo denominador común». «Vamos a redoblar el esfuerzo para culminar las reformas con un amplio acuerdo», ha repetido en varias ocasiones.
En su opinión, se puede alcanzar «un gran pacto» o ir sellando «pactos singulares» sobre cada uno de los temas. «No sé si un gran acuerdo, pero sí espíritu de acuerdo», ha subrayado en su llamamiento a todas las fuerzas políticas de cara al año que está a punto de comenzar.
En cualquier caso, no ha querido que quede ninguna duda de que el Gobierno va a «gobernar» y a seguir «tomando decisiones» porque las reformas «apremiantes» que necesita el país exigen «determinación política».
«Los ciudadanos saben que cada partido que apuesta por una reforma que supone un esfuerzo y un sacrificio se la juega -ha comentado–. Esa es la realidad y la realidad es que el PSOE siempre se la ha jugado por España a la hora de hacer reformas y ahora también. Los demás tendrán que valorar el sentido histórico que tienen en esta cita con su país», advirtió.
