Los democristianos y los separatistas flamencos tensaron ayer un poco más la cuerda de la convivencia en Bélgica con sus vecinos francófonos. La Nueva Alianza Flamenca (N-VA) de Bart de Wever, que persigue la escisión de Flandes, aseguró tener «reservas fundamentales» sobre la última propuesta del mediador real que intenta poner de acuerdo a los principales partidos del país sobre la base de una reforma del Estado …
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