Eroski mantendrá un perfil inversor bajo hasta que se aclaren las perspectivas económicas

El nuevo presidente del grupo Eroski, Agustín Markaide, ha reconocido este viernes que la compañía ha reducido «mucho» su ritmo de inversiones y afirma que tiene previsto mantener un perfil inversor «bajo» hasta que se aclaren las perspectivas económicas.

«Depende más de lo ocurra en el exterior que dentro, porque la situación financiera que tenemos es estable, ya no nos preocupa y ha pasado a un plano secundario», dijo Markaide en un encuentro informativo en Madrid.

El primer ejecutivo de Eroski, quien relevó a Constan Dacosta en el cargo el pasado 1 de febrero, explicó que el grupo ha sido muy activo desde el año 2000 tanto en materia de inversiones como de desinversiones, pero tuvo que reducir el nivel inversor cuando durante dos años no pudo desinvertir al mismo ritmo que en el pasado.

«La compra de Caprabo no fue el problema; representó un tercio de las inversiones en un quinquenio», sostuvo Markaide, quien remarcó que cuando las perspectivas económicas se aclaren, en materia de rentabilidad y de acceso a la financiación, «se volverán a poner en marcha» determinados proyectos.

El presidente del grupo vasco destacó que el ejercicio 2010 transcurrió con «bastante atonía por parte del mercado por segundo año consecutivo», al tiempo que apuntó que Eroski se ha comportado en línea con el sector, si bien «ha mejorado en eficiencias que en la última parte del año ha volcado al mercado con bajadas de precios».

SIGUE LA ‘GUERRA DE PRECIOS’

En su opinión, la batalla por el precio en el sector de la distribuición se mantendrá este año a pesar del incremento de las materias primas. En cualquier caso, incidió en que en Eroski «la gestión del precio de los productos es permanente, pero no es distintiva».

La compañía, que pretende orientarse al cliente, implantará un modelo de gestión de tienda «más cercana», con autonomía en la gestión y con más productos locales. Se trata, según Markaide, de un «cambio revolucionario internamente y en el sector», donde predominan las «empresas sucursalizadas».

NUEVO MODELO DE TIENDA

En concreto, Eroski buscará la adaptación de cada tienda a su mercado, con un funcionamiento autónomo por punto de venta que «sólo es posible» en una sociedad cooperativista, donde «los trabajadores son los dueños de la tienda».

Este proyecto, remarcó, propiciará «frutos múltiples» en materia de satisfacción de clientes y trabajadores, así como en el incremento de beneficios. «No hay una valoración cuantitativa, pero debe ser muy notable «, apuntó.

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