La Audiencia Nacional ha condenado a dos mujeres por estafar en 2003 a centenares de jóvenes desempleados que aspiraban a trabajar como gigolós y a los que pedían que ingresaran cantidades de entre 189 y 600 euros antes de iniciar labores de acompañamiento para una empresa que no desarrollaba en realidad actividad alguna, según han informado fuentes judiciales …
Lea el artículo completo en www.publico.es