Si el sistema universitario español fuese una tarta de chocolate, los estudiantes de ciencias sociales y jurídicas se comerían la mitad del pastel. Tras ellos, los aspirantes a ingenieros y arquitectos engullirían menos de un cuarto -un 23,8%-, seguidos de los médicos y otros profesionales sanitarios -que comerían un 10,8%-, y los estudiantes de artes y humanidades, que se contentarían con un 9,6% … La tarta en cuestión se corresponde exactamente con la composición de estudiantes que han entrado en la universidad española en el curso 2009-2010. Lo primero que se observa si se toman las series históricas de los últimos años es que todo el pastel se ha reducido de tamaño, hasta este último curso, en que se ha revertido el proceso …
Lea el artículo completo en www.cincodias.com
