Los socialistas convirtieron en una victoria la decisión de la Junta Electoral de afear el cartel del PP madrileño que mostraba a Zapatero y a Tomás Gómez riéndose de los cinco millones de parados. El juego era evidente. Fondo rojo para que los votantes pensasen que era del PSOE. Error. Una cosa es transformar la realidad rejuveneciendo a Aguirre -que tampoco engañan a nadie- y otra muy distina confundir a los votantes …
Lea el artículo completo en www.publico.es