Era digital. Hay que comprarse un móvil de tercera generación y contratar una tarifa plana de acceso a internet. Hay que conseguir followers, contarlo en Facebook, estar geolocalizado y descargarse un buen arsenal de aplicaciones. Todo cambia aparentemente rápido y, sin embargo, de momento, el negocio de la telefonía móvil sigue siendo cuestión sobre todo de una cosa: llamadas de voz …
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