Fermín, el linier pelirrojo que alcanzó fama por señalar el penalti más extravagante que recuerdo, pisó el domingo a Cani. Sí, ya sé que a Urízar, nuestro árbitro de cabecera, le parece que no fue a propósito, pero yo vi lo que vi … Siempre he comparado la zona entre el campo y el público con los territorios fronterizos del cine del Oeste, llenos de forajidos, fugitivos, contrabandistas, prostitutas y jueces de la horca …
Lea el artículo completo en www.as.com