Horas antes de la asamblea de las ocho de la tarde, eran pocos los indignados que se atrevían a pronosticar el futuro próximo de la acampada que, desde hace dos semanas, está instalada junto al kilómetro cero de la capital. Los portavoces de las diferentes comisiones se afanaban en explicar que, en la Puerta del Sol, «las decisiones se toman por consenso» y que era «inútil» adelantar cómo iba a evolucionar el Movimiento 15-M en Madrid …
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