El coordinador económico del PP, Cristóbal Montoro, ha expresado su rechazo a la «descafeinada, ineficaz e inútil» reforma de los convenios aprobada por el Consejo de Ministros, porque no es la norma que necesita España para «despejar incertidumbres» ni crear empleo, al tiempo que «complica y burocratiza aun más las relaciones laborales» hasta un punto en que resulta «inaplicable». «Y no estamos para perder el tiempo», ha remarcado.
En rueda de prensa en la sede nacional del PP, el dirigente ‘popular’ ha asegurado que el decreto es una muestra más de que el Gobierno «no tiene capacidad de gobernar ni liderar acuerdos entre los agentes sociales» y ha presentado un texto «eminentemente provisional» que crea inseguridad jurídica en las empresas por las prisas del Gobierno por tener que presentar una ley en vigor ya al próximo Consejo Europeo.
Montoro ha criticado especialmente que no modifique la vinculación entre sueldo e IPC, porque «no se acerca la realidad de las empresas». Así, ha exigido que los salarios «dejen de estar obsesionados por la inflación en un momento en que ha dejado de ser una preocupación para la capacidad económica españoles».
NO ESPERA ACUERDOS CON EL PSOE EN EL CONGRESO
Asimismo, ha lamentado que no se mejore la «flexibilidad interna» para acercarla al sistema de otros países y, además, ha denunciado que ni siquiera tiene efectos inmediatos porque «lejos de simplificar agudiza los conflictos» que, a su juicio, deja a expensas de acuerdos entre empresarios y sindicatos, en lo que considera un «círculo vicioso de la nada».
Montoro ha explicado que el PP presentará un conjunto de enmiendas al decreto cuando se tramite como proyecto de ley como ya hizo hace un año con la reforma laboral, para introducir todas estas mejoras que considera necesarias, aunque también ha mostrado su pesimismo a que el PSOE se avenga a negociar ninguna de ellas y ha dado por hecho que buscará apoyo en otros grupos parlamentarios. «No esperamos nada a estas alturas de la legislatura que ya no da para más», ha indicado.
PIDE ELECCIONES ANTICIPADAS Y CRITICA A RUBALCABA
En este sentido, ha dado por sentado que si el PP llega al poder tras la próximas elecciones generales, ni siquiera necesitará derogar el decreto porque no tendrá aplicación efectiva. Si bien se ha comprometido a reformar las relaciones laborales dentro del paquete de reformas que un gobierno de Mariano Rajoy abordará nada más llegar a la Moncloa, que también afectarán al sector financiero o al energético.
Por último, ha dedicado unos minutos a criticar el papel del vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rualcaba, en la negociación, cuya «sombra» ha achacado a su intención de «buscar votos socialista y de izquierda». A su juicio, el Gobierno está dividido entre «Gobierno y candidatura», lo que es insostenible en un momento «imposible» para la economía española, por lo que ha reiterado la petición del PP de convocar elecciones anticipadas.
