El vicario general de la Diócesis de Ourense aguantó ayer como pudo el plantón de más de 150 feligreses de las cuatro parroquias del municipio de Piñor (1.500 habitantes) que tiene a su cargo el «cura rojo» Antonio Fernández Blanco, a quien el obispado obligó a renunciar a su acta de concejal del PSOE, ganada en el municipio de A Gudiña, si quería mantener su actividad pastoral …
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