La Guardia Civil ha desarticulado una de las bandas de narcotraficantes más activas de Melilla, que se dedicaba a introducir hachís desde Marruecos, para lo cual utilizaba el procedimiento de ocultar la droga en el doble fondo de vehículos.
Según informó el Instituto Armado, en el marco de esta operación han sido detenidas siete personas y localizados 1.700 kilogramos de hachís.
La investigación se inició el pasado mes de enero, cuando se localizaron en Melilla 71 kilogramos de hachís en el doble fondo de un turismo de alta gama que pretendía embarcar en el ferry con destino a Almería.
A raíz de esta incautación, pudo averiguarse que un grupo organizado, con su base de operaciones en Melilla, preparaba transportes de droga, para lo que preparaba vehículos de alta gama con dobles fondos. Efectuaban sucesivas transferencias de titularidad de esos vehículos con el fin de ocultar y dificultar la identidad del verdadero propietario en el caso de que la droga fuera intervenida y eludir las consecuencias del delito.
Fruto de las investigaciones, los agentes detectaron que la organización pretendía realizar el traslado de casi dos toneladas de hachís desde Melilla hasta Holanda, sirviéndose en esta ocasión de una furgoneta de grandes dimensiones provista de dobles fondos en techo y suelo, de tal forma que quedaba forrada por dentro con pastillas de droga. El estupefaciente había sido sometido previamente a un tratamiento para camuflar su olor, con objeto de dificultar el trabajo de los perros antidrogas.
