El ministro francés de Asuntos Exteriores, Alain Juppé, considera que la coalición internacional que interviene en Libia bajo el liderazgo de la OTAN subestimó la capacidad de resistencia de las tropas leales a Muamar Gadafi. Sin embargo, niega que el conflicto corra el riesgo de estancarse. «Nadie habló nunca de ‘guerra relámpago'», ha comentado en declaraciones a France 2.
Por otro lado, ha estimado que no se dan desacuerdos con el Consejo Nacional de Transición (CNT, la autoridad rebelde) y ha subrayado que la coalición internacional encabezada por Francia y Reino Unido continúan confiando en los insurgentes.
Juppé ha asegurado que los rebeldes siguen trabajando con ellos en la búsqueda de «una solución política, porque es evidente que la solución no será militar en última instancia». Sobre la situación en Siria, ha señalado que Francia va a intensificar sus presiones con el objetivo de que se ponga fin a la violencia.
Precisamente, este jueves el presidente sirio, Bashar al Assad, ha promulgado el decreto que permite la creación de partidos políticos. A este respecto Juppé matiza que no es suficiente para atender las demandas de la comunidad internacional.
«La respuesta que consiste en decir ‘Ahora vamos a permitir el multipartidismo’ no es obviamente lo que pedimos: el cese de la represión violenta», ha añadido.
«Vamos a seguir aumentando la presión», ha señalado el ministro sobre la última declaración del Consejo de Seguridad de condena al régimen sirio. Por otra parte, ha lamentado que sea difícil convencer a países como Rusia para que acepten una condena más enérgica, aunque confía en poder conseguirlo.
