El alcalde de Lloret de Mar, Romà Codina (CiU), ha asegurado estar «indignado» con los altercados entre grupos de turistas y policía esta semana y ha afirmado que las cosas tienen que cambiar y que altercados como los de esta noche no pueden repetirse: «No lo podemos permitir», ha afirmado.
Codina ha comparecido este mediodía ante los medios acompañado de todos los concejales del consistorio y ha leído un comunicado, sin admitir preguntas, en el que decía que no solamente se hacía una declaración de intenciones sino que «se marcaba un punto de inflexión en la política turística de Lloret de Mar».
«Estamos indignados y muy molestos, ya basta, la situación no puede continuar así y a partir de hoy las cosas cambiarán, por ello todos los grupos municipales buscaremos la fórmula para que no vuelvan a suceder actos de este tipo nunca más», ha declarado el alcalde.
En el manifiesto, todos los grupos municipales con representación en al ayuntamiento han condenado los disturbios de esta noche que han acabado con 20 detenidos y 22 heridos, y han reafirmado que serán «inflexibles» con los comportamientos incívicos y que se actuará en contundencia.
«Lloret de Mar es una de las principales destinaciones vacacionales europeas y está trabajando para cambiar el modelo turístico, diversificando la oferta y potenciando nuevos atractivos y productos turísticos», ha proseguido el alcalde.
«El Ayuntamiento de Lloret de Mar no está en contra del ocio nocturno, presente en toda destinación turística, y somos conscientes que es un producto con un peso importante, pero lo que no pensamos permitir es el modelo que siguen una parte del empresariado», ha avisado.
Para el alcalde, «es insostenible e incompatible con el modelo de ciudad turística por el que apuestan la mayoría de la población y el consistorio de Lloret de Mar».
ENDURECIMIENTO DE LOS REGLAMENTOS
El alcalde también ha especificado que están trabajando en el endurecimiento de los reglamentos y ordenanzas y que se promoverán un conjunto de medidas para evitar situaciones como las de esta madrugada.
«El Ayuntamiento de Lloret de Mar se dotará también de los medios para hacerlas efectivas, reclamando a las administraciones con competencias que también actúen con rigor y contundencia y que pongan los medios necesarios para que así sea», ha insistido.
Según fuentes municipales, se trabajará en cuatro grandes áreas a partir del mes de septiembre: actividades empresariales, vía pública, salud y seguridad ciudadana, y comportamiento cívico.
En primer lugar se harán inspecciones de control para evitar la venta de alcohol a menores de 18 años, también se controlará el acceso de estos menores en los locales, se vigilarán los aforos en las discotecas y bares, además de si cumplen la legalidad ambiental: «Si no lo hacen serán cerrados», han asegurado.
En la ordenanza de vía pública se añadirán dos apartados: el control de la venta ambulante y el de la prostitución en las calles del municipio.
En relación a la salud y la seguridad ciudadana, el ayuntamiento pedirá que en los momentos de máxima afluencia de visitantes se garantice una coordinación entre los Mossos d’Esquadra y la Policía Local y que además se destinen más recursos policiales a la localidad.
Finalmente se ha anunciado que se creará una ordenanza de comportamiento cívico, en septiembre, para que queden reguladas todas las actuaciones incívicas, además de los ‘disco-tours’.
Para llevar a cabo todas estas medidas, el consistorio ha pedido esfuerzos a nivel supramunicipal; además, ha asegurado que mantiene conversaciones constantes con la Consejería de Interior y que hablarán con los ‘touroperadores’.
El ayuntamiento ha reiterado que se está estudiando la posibilidad de pedir que se avance el horario de cierre de las discotecas.
