ETA. El Gobierno fuerza la construcción del cuartel de la Guardia Civil en Legutiano, donde gobierna Bildu

El Consejo de Ministros aprobó hoy una iniciativa para forzar la construcción del cuartel de la Guardia Civil de Legutiano (Álava), que quedó destruido tras el atentado de ETA del 14 de mayo de 2008. En esta acción terrorista murió un agente y otros resultaron heridos.

José Blanco, portavoz del Gobierno y ministro de Fomento, explicó, en la rueda posterior al Consejo, que el Ayuntamiento de Legutiano, actualmente gobernado por Bildu, había negado la licencia de obras para que la Benemérita tenga nuevas instalaciones en esta localidad.

En este sentido, Blanco destacó que, en una decisión con pocos precedentes, el Ejecutivo ha acordado autorizar la construcción de estas instalaciones de Legutiano, debido al �excepcional interés público� de estas obras.

El portavoz explicó que este cuartel es �necesario� para «asegurar la capacidad logística y operativa de la Guardia Civil en esa zona». Destacó, asimismo, que el Ayuntamiento de esta localidad alavesa había denegado la licencia de obra para construir estas nuevas instalaciones de la Benemérita.

PLAN URBANÍSTICO

Por este motivo, Blanco estimó que se ha tomado la �medida excepcional� de que el Ministerio de Fomento haya elevado al Consejo de Ministros �la propuesta de que se acuerde la ejecución del proyecto y ordene el procedimiento de modificación puntual del planeamiento urbanístico� de Legutiano para que se construyan las nuevas instalaciones.

En este sentido, el portavoz se refirió a que el Gobierno no ha bajado �la guardia contra ETA�, al tiempo que añadió que �las Fuerzas de Seguridad del Estado cumplen con ejemplaridad su obligación de velar por la seguridad de todos�. Por este motivo es �imprescindible� que el Instituto Armado cuente con nuevas instalaciones en Legutiano.

Se da la circunstancia de que la aprobación de estas obras de la Guardia Civil en Legutiano coincide con una campaña de Bildu contra la Guardia Civil en el País Vasco y Navarra. De hecho, la coalición abertzale llegó a amparar el pasado 3 de septiembre la celebración de un desfile en la localidad navarra de Alsasua, donde se denegó al Rey y se pidió la salida de la Benemérita de la comunidad foral.

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