Ebro Foods cree que CNC «ha sido muy dura» en la venta de marcas de arroz aunque acata la decisión

El presidente de Ebro Foods, Antonio Hernández Callejas, considera que la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) «nos ha tratado con bastante dureza» con su decisión de aprobar la compra por parte de Ebro del negocio arrocero de SOS –actual Deoleo– en España, sujeta a que la firma adquiriente licencie por 10 años y con opción de compra la marca Nomen, así como de que venda las marcas La Parrilla, La Cazuela, Pavo Real y Nobleza.

No obstante, ha asegurado que el acuerdo alcanzado con Competencia «es firme, lo acatamos y respetamos y no hay vuelta atrás, ya no se puede hacer nada, ojalá nos permitiera volver atrás, pero a lo hecho, pecho.

Hernández Callejas ha explicado que Competencia entendía que tras la compra de la división arrocera de SOS, «la cuota del 29 por ciento que Ebro alcanzaba en este área la CNC entendía que era una cuota excesiva, por lo que nos ha obligado a vender una serie de marcas, entre ellas Nomen, para volver a estar en torno al 25 por ciento».

En ese sentido, el presidente de Ebro Foods ha recordado que en Estados Unidos «tenemos la misma cuota de mercado en el arroz del 29 por ciento y allí no nos ha puesto ninguna pega».

«En España el Tribunal de Defensa de la Competencia ha sido muy duro con nosotros», ha agregado Hernández Callejas, quien apunta que «la realidad es que en España las marcas de distribución tienen un peso muy importante, y ese capítulo de las marcas de distribución no sido bien asimilado por parte de Competencia».

No obstante, ha dejado claro que Ebro «acata y respeta» la decisión y seguirá trabajando «para seguir creciendo en España, dentro del evidente liderazgo que tenemos».

Sobre la operación de compra de SOS por parte de Ebro, Hernández Callejas ha indicado que la operación más importante de los últimos tiempos para Ebro ha sido la compra de las americanas, aunque ha indicado que la operación con SOS «representa dos vertientes la arrocera y el aceite; la arrocera supone culminar un desarrollo que faltaba, aunque ya éramos los primeros del mundo sin SOS, que ahora complementa bien el panorama en distintas áreas, como Arabia Saudita, Holanda o España, de forma que esta operación no nos hacía falta pero era un buen complemento».

En cuanto a la vertiente aceitera, Hernández Callejas destaca que Ebro «ha contribuido a desatascar una situación financiera muy peliaguda y compleja, con problemas derivados del endeudamiento excesivo de la compañía, y en este momento hay un mejor horizonte y se consigue financiación para la empresa».

Sobre la división arrocera, el presidente de Ebro Foods asegura que ninguna fábrica va a cerrar, cuando SOS tiene plantas en Valencia, Holanda y Estados Unidos.

Hernández Callejas, quien destacó que Ebro lleva «un ejercicio bastante bueno, dentro de la problemática que hay en la economía», ha indicado que la empresa actualmente «está intentando mimar a accionistas con buenos dividendos, pues esta empresa que está en el IBEX no tiene deuda en época de crisis, procura reducir costes, no hace ningún disparate e invierte cuando ve que hay oportunidades».

RETOMAR SUNRICE

«Aprovecharemos oportunidades pero sin volvernos locos, siempre con mesura y prudencia», ha agregado este empresario, quien ha reconocido que este año la operación más importante era la de la australiana SunRice «pero no se pudo llevar a buen puerto porque hacía falta un voto favorable del 75 por ciento de los agricultores australianos y conseguimos el 67 por viento».

Ha precisado que esta operación, que supone invertir 450 millones de euros, «posiblemente en el futuro podremos volver a retomarla, pero esos 450 millones de euros del mes de mayo no tienen nada que ver con los 450 millones de hoy, pues hoy valen mucho mas y ha sido un alivio saber que todavía tenemos ese dinero a disposición en nuestra cartera, con eso hoy se compra mucho más».

MODELO DE INTERNACIONALIZACION

Sobre la posibilidad de aplicar su modelo de internacionalización a otras empresas, considera que «no es tan fácil aplicar la internacionalización, pero Ebro ha partido de una base muy potente que permite llegar a mercados internacionales y comprar empresas en el extranjero, porque teníamos una estructura muy poderosa».

«Nuestro modelo de internacionalización no es un modelo que sea trasladable al cien por cien de las empresas», ha reconocido Hernández Callejas, quien indica que «en un mundo global hay que buscar en la medida de lo posible la internacionalización, pero no creo que nuestro modelo sea un modelo enfocable al cien por cien de la gente; nosotros tenemos la fortuna de tener una plataforma internacional muy potente cuando hemos abogado por este modelo».

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