Fernando Castedo ( Madrid, 1941), fue nombrado en 1981 director general de Radio Televisión Española y en el tiempo en el que ocupó el cargo tuvo que hacer frente, entre otras cosas, al intento de golpe de Estado de de Tejero el 23 de febrero de ese año.
José Luis Balbín, en su entrevista a Periodista Digital, consideró que la época más libre que él vivió en RTVE fue cuando estuvo dirigido por Castedo.
Una época en la que se consideró que el Ente público estaba enfrentado al Gobierno (UCD). Sectores de la derecha acusaron a Castedo y a sus colaboradores de aquella etapa (Iñaki Gabilondo, Eduardo Sotillos, o el propio Balbín) de ser más favorables al PSOE.
- «ACEPTÉ EL CARGO. EN DEFINITIVA, SER PROPUESTO POR VARIOS POLÍTICOS ACTUANDO POR CONSENSO PARA PRESIDENTE DE RTVE ERA UNA SATISFACCIÓN PERSONAL»
- «A MI ADOLFO SUÁREZ ME DIJO QUE TENÍA QUE SER INDEPENDIENTE, QUE NO HICIERA CASO DE LOS MINISTROS. ME LO DIJO LITERALMENTE. YO NO HE SIDO MARXISTA, NO LO SOY Y, DESDE LUEGO, NO LO ERA»
- «LO QUE CUENTAN QUE OCURRIÓ EL 23-F NO FUE FICCIÓN, FUE LA REALIDAD. TODO EL RATO QUE MI DESPACHO ESTUVO OCUPADO POR MILITARES, TUVE UNA PERSONA APUNTÁNDOME»
- «ME ADVIRTIERON DE QUE EXISTÍA LA POSIBILIDAD DE QUE ALGUNOS MILITARES PUDIERAN INVADIR Y TOMAR PRADO DEL REY»
- «CUANDO SE FUERON LAS FUERZAS MILITARES DEL MEDIO LE PREGUNTÉ AL COMANDANTE DE LA FUERZA SI VOLVÍA A SER DIRECTOR GENERAL DE LA CASA, Y ME DIJO QUE HICIERA LO QUE QUISIERA»
- «CALVO SOTELO NO PIDIÓ LA CABEZA DE IÑAKI GABILONDO. PIDIÓ MI CABEZA»
- «DECIDÍ DIMITIR EN OCTUBRE PORQUE NO TENÍA SENTIDO UNA GUERRA ENTRE RTVE Y LA PRESIDENCIA DEL GOBIERNO»
- «SE ME HA ACUSADO DE INTENTAR FAVORECER UNA OPCIÓN, Y MUY MAL LO HE TENIDO QUE HACER CUANDO EL QUE HA GANADO NO HA SIDO EL PSOE»
- «EN EL AÑO 87 YO FUI CANDIDATO A LA COMUNIDAD DE MADRID Y OBTUVE MUCHOS VOTOS. TENGO QUE DECIR, CON ORGULLO, QUE SAQUÉ MÁS VOTOS QUE SAGÚN, QUE LUEGO FUE PRESIDENTE DE LA COMUNIDAD DE MADRID»
- «A ALBERTO RUIZ GALLARDÓN LE FALLARON DOS DIPUTADOS DEL PROPIO PARTIDO POPULAR, NO DEL CDS»
- «VOTAR EN CONTRA DE LA GESTIÓN DE LA EJECUTIVA FUE UN EJERCICIO DE LEALTAD CON EL PARTIDO, CON ADOLFO SUÁREZ Y CONMIGO MISMO»
- «NO FUE EL MÁS BRILLANTE PAPEL -EL DE ADOLFO SUÁREZ- DEL PRESIDENTE DE UN PARTIDO POLÍTICO»
- «EN MI CASO ESTABA CLARO QUE EL GOBIERNO ESTABA EN CONTRA DE RTVE, NO TENGO NI LA MÁS MÍNIMA DUDA»
«ACEPTÉ EL CARGO. EN DEFINITIVA, SER PROPUESTO POR VARIOS POLÍTICOS ACTUANDO POR CONSENSO PARA PRESIDENTE DE RTVE ERA UNA SATISFACCIÓN PERSONAL»
«Aquella fue una época en la que todos los que estábamos comprometidos, lo estábamos precisamente con la libertad de la televisión, por lo que fue fruto de un esfuerzo colectivo, pero creo que también hay un componente de afecto en lo que dicen unos y otros. Se había promulgado el estatuto de la radio y la televisión el año anterior, 1980, y se preveía que el director general tenía que ser elegido por mayoría cualificada. Eso suponía la necesidad de que se pusieran de acuerdo los dos partidos principales, Unión del Centro Democrático (UCD) y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en aquel entonces. En el mes de mayo de 1980 me llama el secretario general de la UCD para decirme que entre los tres nombres que se están barajando con el Partido Socialista para dirigir una nueva etapa de televisión, que pasaba de ser un ente dependiente de un ministerio a ser un ente autónomo y sometido al control parlamentario, estaba mi nombre, y que lo más probable es que yo acabara siendo el Director General de RTVE y que si estaba dispuesto a aceptar el compromiso. Le dije que sí».
«En definitiva, ser propuesto por varios partidos políticos actuando por consenso, era una satisfacción personal. Yo no volví a tener más noticias y aproveché ese periodo de tiempo para estudiar cómo funcionaban otras televisiones en materia de libertad informativa. No volví a recibir noticia alguna hasta el mes de octubre de ese mismo año. Estando en el aeropuerto de Madrid, recibí una llamada de presidencia del gobierno, el presidente Adolfo Suárez, al que yo no conocía personalmente, y hablé con él. Me dijo que tenía casi todas las papeletas para ser el nuevo director general de RTVE y que cuando volviese de mi viaje me pusiese en contacto con él y así fue. Con todo, no volví a tener más noticias hasta bien entrado diciembre, que fui llamado al palacio de la Moncloa, donde estuve hablando mucho rato con el presidente Suárez, al que conocí ese día personalmente. No deja de ser una curiosidad que no me hablase precisamente de la televisión. Sin embargo, unos veinte días después me llamaron del partido para decirme que mi nombramiento iba a tener lugar en uno de los consejos de ministros del siguiente año (1981) y efectivamente así se produjo».
«A MI ADOLFO SUÁREZ ME DIJO QUE TENÍA QUE SER INDEPENDIENTE, QUE NO HICIERA CASO DE LOS MINISTROS. ME LO DIJO LITERALMENTE. YO NO HE SIDO MARXISTA, NO LO SOY Y, DESDE LUEGO, NO LO ERA»
«Me interesa destacar algún particular importante. – Ante las acusaciones que se dieron en diversos periódicos de que RTVE estaba dirigido por Marxistas- Lo primero es que yo fui nombrado por consenso de las dos fuerzas políticas. Lo segundo es que a mi Adolfo Suárez me dijo que tenía que ser independiente, que no hiciera caso de los ministros. Me lo dijo literalmente; que tenía que cumplir con esa función. Bajo esa condición a mi me apetecía el proyecto y me enredé en el proyecto. Yo tenía mi vida profesional y personal satisfactoriamente resuelta. Naturalmente, el que, de pronto, empiece a aparecer en televisión la oposición, que en ese momento era el PSOE, y que la televisión pública dedicara tiempo al partido de la oposición, obviamente menos que al partido del gobierno, y aun así muy superior al tiempo que se le dedicaba anteriormente, hizo crujir ciertas estructuras».
«Si a esto añadimos que se produce un intento de golpe de estado el 23 de febrero, y que ese golpe de estado, de alguna manera, seguramente algún nostálgico hubiera querido que hubiera salido adelante, y que la tv tuvo un papel significado en proyectar hacia la opinión pública lo que fueron las posiciones que adoptaron personajes absolutamente relevantes de España, como fue su Majestad el Rey, todo puede explicar este barullo de informaciones. Ésta – la acusación citada anteriormente- es una información publicada por el diario Alcázar, singularmente significado entonces, que daba apoyo a las posturas de la derecha más extrema de nuestro país, dirigido por Antonio Izquierdo, el domingo 21 de Marzo. Después de haberse abortado el golpe de Estado. Probablemente después de haberse celebrado un debate que hubo en televisión, que de alguna medida yo mismo propicié con la gente de mi equipo, entre Antonio Izquierdo y Juan Luis Cebrián, el director de El Pais. Un famoso debate que tuvo mucho eco».
«Es evidente que se dicen las cosas que se quieren decir. Yo no he sido marxista nunca, no lo soy y, desde luego, no lo era. Estaba en el papel propio de un director general, que quería ser independiente, que además la ley le obligaba a serlo y que ya en ese momento, el 21 de marzo, no ya con ese presidente del gobierno, que había dimitido, pero en cualquier caso, con independencia de lo que planteara el presidente del gobierno, era muy consciente de cual era mi papel como director del ente público y traté de cumplirla siempre con la mejor disposición. He de decir que los servicios informativos no estaban ni mucho menos en manos de gente con pretensión de marxismo. No dudo que hubiera alguno que lo fuera, pero ese era el papel y la importancia de lo que se pretendía hacer en televisión: que estuvieran todas las personas que podían aportar algo, desde el pluralismo informativo, a lo que era el papel de esa casa».
«LO QUE CUENTAN QUE OCURRIÓ EL 23-F NO FUE FICCIÓN, FUE LA REALIDAD. TODO EL RATO QUE MI DESPACHO ESTUVO OCUPADO POR MILITARES, TUVE UNA PERSONA APUNTÁNDOME»
«No fue ficción, fue la realidad. Todo el rato rato que estuvo ocupado mi despacho por militares, tuve una persona en principio encañonándome y luego con el fusil preparado. El vídeo del asalto al congreso lo tenía debajo de mi siento y yo estaba sentado encima de él también es verdad. No es ciencia ficción. Son hechos reales que a uno le tocaron vivir, que hoy provocan risa, pero en ese momento eran más trágicos que otra cosa».
«Yo no solo estaba al frente sino que estaba en la casa. Había tenido una reunión del consejo de administración que estábamos reunidos desde las cuatro o cuatro y media de la tarde, porque al día siguiente, se iba a continuar con la ceremonia del cambio de presidente del gobierno. A las 6 de la tarde tenía una reunión en el despacho del director de El País, Juan Luis Cebrián, con los titulares o directores de otros medios de comunicación, porque había unos cónsules secuestrados, y ETA exigía que los medios de comunicación diéramos una especie de decálogo de planteamientos de ETAe íbamos a hablar si lo publicábamos o no».
«ME ADVIRTIERON DE QUE EXISTÍA LA POSIBILIDAD DE QUE ALGUNOS MILITARES PUDIERAN INVADIR Y TOMAR PRADO DEL REY»
«Cuando yo salía de la reunión del consejo apresuradamente para ir a la otra reunión en mi coche oficial, recibo una llamada por el teléfono del vehículo del gabinete telefónico de presidencia del gobierno, diciendo que habían entrado unos guardias civiles en el congreso dando tiros».
«Y que aunque no se sabía qué podía ser, todo apuntaba a que podía ser un intento de golpe de estado. Yo pedí que llamaran a Juan Luis Cebrián para decirle que no podría ir a la reunión y que me encaminaba a mi despacho de Prado del Rey. Llegué allí entre las seis y las seis y media, visioné la parte de vídeo que se había confeccionado, mantuve la televisión de mi despacho viendo esa situación que estaba viviendo el Congreso de los Diputados en directo, y di las instrucciones necesarias para que todo el mundo estuviera preparado. El general que era entonces secretario de la Casa del Rey, me advirtió que existía la posibilidad de que algunos militares pudieran invadir y tomar Prado del Rey. Dispuse de lo necesario con el director de tv, con el director de radio, con el brigada que era el jefe de la guardia de seguridad de RTVE, que era de la Guardia Civil. Así, mientras preparaba todo, me enteraba al mismo tiempo, a través de RNE, de cómo estaban las cosas. Dedicamos ese tiempo a todo lo que podíamos hacer: esperar y ver cual era la situación para ir tomando decisiones. La televisión siguió su programación normal hasta que llegaron las fuerzas que tomaron Prado del Rey, momento en el que nos obligaron a suspender todo programa informativo y a dar música militar en RNE».
«CUANDO SE FUERON LAS FUERZAS MILITARES DEL MEDIO LE PREGUNTÉ AL COMANDANTE DE LA FUERZA SI VOLVÍA A SER DIRECTOR GENERAL DE LA CASA, Y ME DIJO QUE HICIERA LO QUE QUISIERA»
El director de informativos entonces era Iñaki Gabilondo, yo mantuve conversaciones con él, y cuando se fueron las fuerzas militares del medio, le pregunté al comandante de la fuerza, si volvía a ser el director general de la casa, y me dijo que hiciera lo que quisiera, delante de él le dije a Iñaki Gabilondo que se preparar para dar la información de lo que había pasado. Iñaki se quedó un poco sorprendido porque al ser jefe de informativos no estaba en pantalla, y yo le dije que tenía que ser él, como director de informativos, el que diera la información».
«CALVO SOTELO NO PIDIÓ LA CABEZA DE IÑAKI GABILONDO. PIDIÓ MI CABEZA»
«Calvo Sotelo no pidió la cabeza de Iñaki Gabilondo. Pidió mi cabeza. Él, a los 3 días de llegar al gobierno, tuvo una entrevista con él, y consideraba pertinente que yo dimitiera, y yo desestimé tomar esa decisión. No me convivió a hacerlo, pues no podía, necesitaba la mayoría del estatuto. Objetivamente no había razón. El problema de Iñaki fue que al final, los informativos estaban muy complicados, y él era el director de informativos y salió un programa sobre el paro que él no había visionado, y en un momento especialmente crítico. Yo le dije que como director de informativos ese es un programa que debía haberse controlado, para ponderar la conveniencia de sacarlo o no. En base a eso yo tomé la decisión, y le dije: ‘Iñaki, creo que debes dejar la dirección de informativos e incorporarte en otro lugar de la casa’. Luego él me dijo que no quería incorporares a la casa, y yo lo que hice, que no fue juzgado positivamente por parte de la presidencia del gobierno, fue explicar a toda la casa en una especie de acto asambleario el cese de Iñaki Gabilondo, algo que me apenó muchísimo».
«DECIDÍ DIMITIR EN OCTUBRE PORQUE NO TENÍA SENTIDO UNA GUERRA ENTRE RTVE Y LA PRESIDENCIA DEL GOBIERNO»
«Decidí dimitir en Octubre porque al final no tenía sentido una guerra entre una institución como TVE y otra institución, sin duda mucho más trascendente para el país, que es la Presidencia del Gobierno. Yo esperaba que con el tiempo se dieran cuenta de que eso que estaba haciendo en televisión era bueno para el país. Necesario y bueno. Y creo que el ejemplo de independencia que dio fue muy notable. Tuve la suerte de contar con unos colaboradores extraordinarios, líderes de audiencia y líderes en su profesión. Podría citar tantos periodistas de primer nivel…».
«SE ME HA ACUSADO DE INTENTAR FAVORECER UNA OPCIÓN, Y MUY MAL LO HE TENIDO QUE HACER CUANDO EL QUE HA GANADO NO HA SIDO EL PSOE»
En ese último periodo tuvieron lugar las elecciones autonómicas de Galicia, en un momento en el que la Televisión Española estaba acusada de marxista. Recuerdo que con todo ese clima, las elecciones de Galicia no las gana ni la UCD ni el PSOE. Las gana Alianza Popular, que hasta entonces no había tenido ningún peso político, y hoy es el Partido Popular. Así dije en la rueda de prensa cuando dimití. Se me pide el cese o la dimisión por hacer aquello para lo que fui nombrado. Se me ha acusado de intentar favorecer una opción, y muy mal lo he tenido que hacer cuando el que ha ganado no ha sido el PSOE. Pero resulta que tampoco ha ganado UCD, sino una tercera fuerza. Aquella declaración produjo alguna risotada de los periodistas que asistían a la rueda de prensa. era evidente que la televisión no había influido en las decisiones y que no había querido ni podido influir. En las elecciones influyen los políticos. Algunos creen que por tener más tiempo tienen más audiencia, y con menos tiempo tienen más riesgo de perder eco electoral.
«EN EL AÑO 87 YO FUI CANDIDATO A LA COMUNIDAD DE MADRID Y OBTUVE MUCHOS VOTOS. TENGO QUE DECIR, CON ORGULLO, QUE SAQUÉ MÁS VOTOS QUE SAGÚN, QUE LUEGO FUE PRESIDENTE DE LA COMUNIDAD DE MADRID»
«No fui fundador del CDS exactamente, sino que me incorporé cuando ya estaba creado el partido. Fue una decisión personal. Tenía otra oferta de integrarme, precisamente, en el PSOE, y de ir a las elecciones del 82 como candidato por Madrid, y es una oferta a la que dije que no. Esto ahora se puede decir, pero entonces era muy incómodo decirlo. En el año 87 yo fui candidato a la comunidad de Madrid y saqué un 17% de los votos. Muchos votos. Tengo que decir, con orgullo, que en Madrid capital saqué más votos que el candidato del CDS por Madrid Capital que era Agustín Rodriguez Sahagún, que luego fue alcalde de Madrid. Éramos las dos cabezas de cartel. Entonces no me pareció oportuno comentarlo más veces, obviamente el que quiso verlo, lo vio».
«A ALBERTO RUIZ GALLARDÓN LE FALLARON DOS DIPUTADOS DEL PROPIO PARTIDO POPULAR, NO DEL CDS»
«Anticipé lo que iba a ser el comienzo del fin del CDS, y así se lo dije a Adolfo Suárez, y creo que acerté y él me dio la razón. Yo fui leal en mis planteamientos. Si no estoy de acuerdo, lo que hice fue dejar mi escaño en el congreso de los diputados, y me marché a mi profesión. Yo no es que me opusiera, sino que me pareció que a medio o largo plazo podía ser un error. Trabajé activamente para que Alberto Ruiz Gallardón fuera presidente de la comunidad de Madrid. Le fallaron dos diputados del propio Partido Popular, no del CDS. Del CDS no le fallamos ninguno, ni yo mismo. Yo voté a favor de Alberto Ruiz Gallardón».
«VOTAR EN CONTRA DE LA GESTIÓN DE LA EJECUTIVA FUE UN EJERCICIO DE LEALTAD CON EL PARTIDO, CON ADOLFO SUÁREZ Y CONMIGO MISMO»
«Cuando se produce la votación sobre el órgano directivo del partido la aprobación de la gestión, yo recuerdo que voté en contra, siendo miembro de la ejecutiva, y voté en contra de la gestión de la ejecutiva, porque me parecía que no se había hecho correctamente. También fue un ejercicio de lealtad con el partido. Sin duda estas cosas en los partidos políticos se ven mal, y la prueba está que todo el señor, como decía Guerra en su tiempo, que se mueve, no sale en la foto. Pero eso ha sido así siempre y si no cambian las cosas seguirá siendo. Mientras los partidos políticos designes a sus candidatos, los candidatos, si no tienen capacidad personal para decir ‘hasta aquí hemos llegado’, estarán a disposición de los partidos políticos. Yo no quise una pérdida y no quería ese cisma. Probablemente una persona con más ambición política que yo debería haberlo hecho, pero yo lo único que quería era ser leal con mi partido, con Adolfo Suárez y conmigo mismo, y dije que no estaba de acuerdo. Un amigo común me comentó que tiempo después Adolfo Suárez, cuando aún estaba lúcido, le comentó que ‘tenía razón Fernando Castedo cuando me dijo aquello’. No se si es real o no, pero respondió a esa actitud mía de ser leal.»
«NO FUE EL MÁS BRILLANTE PAPEL -EL DE ADOLFO SUÁREZ- DEL PRESIDENTE DE UN PARTIDO POLÍTICO»
«La valoración sobre Adolfo Suárez tengo que hacerla desde el máximo respeto y la máxima admiración. Es un personaje providencial en la historia de España, que no se le ha hecho toda la justicia que merece, que evidentemente es un protagonista principal, junto con otras personas, sin duda, en todo lo que ha sido el devenir democrático de nuestro país. Como presidente de partido yo creo que los hechos son también muy elocuentes, y lo cierto es que la UCD acaba explosionando. Estas cosas no se producen porque sí, se producen por alguna circunstancia. No soy quién para juzgar cuáles son el conjunto de esas circunstancias, ni desde luego creo que ahora hagamos ninguna contribución a nada. Lo cierto es que esos son los hechos, y los hechos bastarían para explicar que no fue el más brillante papel del presidente de un partido político.
«EN MI CASO ESTABA CLARO QUE EL GOBIERNO ESTABA EN CONTRA DE RTVE, NO TENGO NI LA MÁS MÍNIMA DUDA»
«En cuanto a la valoración de TVE, soy ahora un espectador más y desconozco cómo funcionan las cosas. Yo creo que es ‘normal’ que cada gobierno vea que el comportamiento de un medio público de radio y televisión no le es del todo favorable. En mi caso estaba claro que el gobierno estaba en contra de RTVE, no tengo ni la más mínima duda. Estaba en contra institucionalmente, no a nivel individual. Yo tenía muchas oportunidades de hablar con los miembros del gobierno, y hablaba con ellos constantemente, como hablaba con los líderes de la oposición, como Alfonso Guerra, Manuel Fraga, Santiago Carrillo».
Hablábamos de televisión y la política del país. Por tanto no puedo juzgar muy bien lo que pasa en televisión. Yo creo que es absolutamente esencial que quien dirija el medio, que no tiene por que ser un profesional, tiene que ser una persona que tenga criterio y capacidad política para aguantar una serie de presión, y tiene que tener el sentido de la independencia necesario para tomar decisiones o para propiciar que los profesionales tomen decisiones, que es lo correcto, desde su independencia profesional. ¿Cómo se arbitra esa independencia profesional? para eso están los comités de relación, bajo la dirección de los responsables. Pero es necesario que el director o el presidente de la corporación sea un poco el parapeto de esa presión política. Modelos hay en el derecho europeo y no es tan difícil de copiar. Lo que tenemos que tener es clara la necesidad de que esa persona aguante lo que tenga que aguantar. A lo mejor yo no supe aguantar lo suficiente o no me encontré con las fuerzas necesarias para aguantar lo suficiente. Luego, también, saber defender el trabajo que hace tu gente, y luego, en un etcétera continuado, elegir a aquellas personas que sean más idóneas. Yo, repito, tuve una enorme suerte».
Con la colaboración de Marina López Fernández y Sandra Besga.