Toda una lección de eficacia y buen hacer, y que viene a paliar en parte las críticas más extendidas entre policías y guardias civiles: apenas realizan prácticas de tiro, y las que realizan no se adaptan a la realidad de su trabajo, ya que se limitan a tiro estático.
Por eso, para cubrir estas carencias y ayudar a mejorar el servicio de las fuerzas del orden, sobre todo a la hora de hacer frente a las amenazas y riesgos actuales a los que deben hacer frente los agentes del orden, principalmente el yihadismo, el Ejército ha realizado una serie de jornadas por cuarteles de toda España, en los que militares con experiencia en combate han explicado a los agentes cómo deben realizar los disparos en situaciones de alto estrés.
Estos escenarios recrean situaciones reales, como aquellas en las que la puntería disminuye tras el desgaste físico que provoca la persecución a pie de un sospechoso.
Las jornadas, según se hace eco ‘ECD‘, han sido impartidas por miembros del Mando de Operaciones Especiales.