Hoy en día cualquiera se ‘titula’ aunque sea analfabeto perdido, y las redes sociales son una tapadera perfecta para colar falsas habilidades o sacar tajada de dudosas ‘profesiones’.
El restaurante Topik, situado en Barcelona, ha sido el plato elegido para una tragona suiza de mucho cuidado que pretendía comer por la cara, con la excusa de que es una ‘influencer’ de atinado juicio.
Segun da cuenta ‘HP‘, pretendía a cambio de zampar como una descosida, publicar una fotos en sus redes sociales.
«Mi nombre es Leila, tengo 27 años y vivo en Suiza. He estado muy activa como influencer en el último año y ahora estoy viajando como influencer y publicando fotografías en mi cuenta. ¿Tienes alguna oferta? ¿Comida o bebida gratis o algún descuento? Normalmente viajo con amigos y me gustaría tener una oferta para todos»,
pide la joven.
Niños de 27 años pidiendo si les regalas comida o les haces descuento en tu negocio,se denominan “influencers”, de nuestra casa viven 7 familias,pídele dinero a tu padre. pic.twitter.com/l563dD3ZS4
— Topik Restaurant (@topikrestaurant) 30 de abril de 2018
«No tenemos descuento, lo siento», dijo el restaurante a la joven, y le dio una contundente respesta en Twitter que seguramente le cortó la digestión, si es que había comido.
Pillan al dueño de restaurante orinando en la sopa de su competencia