El encuentro ‘secreto’ del ministro de Transportes, José Luis Ábalos, y Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Nicolás Maduro, Delcy Rodríguez, está siendo abordado a profundidad por los medios de comunicación de Estados Unidos. La reconocida periodista venezolana Patricia Poleo ha realizado un profundo análisis en su programa ‘Factores de Poder’, que se realiza desde Miami, donde ha tomado como referente las exclusivas publicadas por Periodista Digital.
En concreto, la periodista ha comenzado a tratar el ‘caso Ábalos’ a partir de la noticia de José Antonio Puglisi: Exclusiva / La Policía Nacional amenaza a Ábalos: “si nos culpa, saldrán más cosas”. Una información donde se evidencia el descontento de los Cuerpos de Seguridad del Estado con el gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, ya que fue una decisión política la de evitar la detención y posterior deportación de la número dos del régimen bolivariano.
Ante el temor de que les culpen del gran escándalo que evidencia los vínculos del régimen de Nicolás Maduro con el actual “gobierno progresista” del PSOE y Podemos. La Policía Nacional lanzó una contundente amenaza contra el ministro de Transportes:
“Nosotros estábamos listos y la queríamos pillar. Fueron ellos [los políticos] quienes nos retiraron y nos ordenaron que no moviésemos un dedo”, afirman fuentes policiales a Periodista Digital. Ahora, con el miedo a que los conviertan en ‘cabeza de turco’ lanzan una dura amenaza al ministro José Luis Ábalos: “si nos echan la culpa de aquello ocurrido en la madrugada, saldrán muchas más cosas a la luz. Que no somos la policía municipal, joder. Nosotros estábamos preparados para realizar lo correcto”.
Patricia Poleo ha leído la noticia de Periodista Digital y ha analizado la gravedad de los sucesos, ya que existe una clara demostración de que España habría incumplido con las sanciones de la Unión Europea contra Delcy Rodríguez. En este sentido, la presidenta de Veneuropa, Patricia Betancourt, afirma que el gobierno de España se ha esforzado en crear una ‘bomba de humo’ con el debate sobre si pisó o no el suelo español, ya que en el momento en el que el avión sobrevoló el espacio Schengen ya se habían violado las sanciones.
