La cesta 'soviética' quedó en el olvido

Fracaso de Yolanda Díaz: su ‘plan estrella’ se ha evaporado

Más de dos meses después del anuncio de Díaz, fuentes del sector, aseguran que no han vuelto a tener ni propuestas del Gobierno

Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, propuso en septiembre imponer en España un tope al precio a algunos alimentos para abaratar la cesta de la compra, copiando estrategias seguidas por países como Argentina y Cuba.

«Nuestro planteamiento es que las grandes distribuidoras lleguen a un acuerdo y, a través de los márgenes empresariales, aseguren una cesta de la compra asequible», decía entonces Yolanda Díaz, metiéndose en el terreno del ministerio de Consumo de Alberto Garzón.

Díaz no rectificó ante las advertencias de fracaso de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ni cuando los supermercados, de manera conjunta, aseguraron que el tope de precios no era útil y presentaba graves riesgos para la competencia.

Ahora, ya a mediados de noviembre, más de dos meses después del anuncio de Díaz, fuentes del sector, aseguran que no han vuelto a tener ni propuestas del Gobierno, ni reuniones con la vicepresidenta segunda, y la inflación en España continúa por encima del 7%.

El ‘plan estrella’ de Yolanda Díaz, fracasa sin llegar a empezar.

La cesta soviética de Díaz

La propuesta estrella de la ministra de la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz es que las grandes cadenas de supermercados como Mercadona, Carrefour o Alcampo topen los precios de una determinada cantidad de productos básicos de la cesta de la compra. Esta medida ha divido al propio Gobierno Frankenstein, con el ala PSOE despreciándola y tomándola como propaganda electoral. Además, ha generado críticas y temor en el sector de la distribución.

La ministra de Defensa, Margarita Robles, y el ministro de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Luis Planas, se pronunciaron en contra de la propuesta de Díaz. El ministro de Presidencia, Félix Bolaños hizo un ridículo monumental para evitar criticar a Díaz en TVE. Por su parte, Podemos, en voz de la ministra de de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, se posicionó a favor, aunque afirmó que no fueron tomados en cuenta por Díaz para desarrollar la propuesta.

Miedo en el pequeño comercio

El pequeño comercio teme perder más cuota de mercado si se pone en marcha la medida y advierten que podría traer como consecuencia el cierre de negocios.

La Confederación Española de Comercio (CEC) ha manifestado su “absoluto rechazo y malestar”, al tiempo que ha alertado de las consecuencias de aplicar la propuesta de Díaz. “De salir adelante, esta iniciativa atentaría directamente contra el comercio de proximidad al ejercer un efecto llamada sobre los consumidores para comprar en las grandes cadenas”, por lo que las cuotas de las grandes cadenas aumentarían aún más.

Por su parte, la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), estima que la medida es contraria al libre mercado y perjudicial para tenderos, fruteros y pescaderos.“Cuidado, porque hay que hablar con la industria agroalimentaria, porque indudablemente poner topes puede dañar a los productores, a los ganaderos, a los agricultores, pero también daña al pequeño comercio, que no tiene la misma capacidad de competir. Parece que estamos como siempre intentando señalar al tendero, al frutero y al pescadero”, señala el presidente de la ATA, Lorenzo Amor.

Pufo de Cesta

El primer “logro” de la propuesta de Díaz fue que Carrrefour -luego de reunirse con ella y con el ministro de Consumo, Alberto Garzón– estableciera una lista de la compra de 30 productos que la cadena francesa ofrece a 30 euros.

Sin embargo, esta cesta no incluye proteínas y frescos, exigencias de la ministra. La cadena tampoco ofrece una cesta específica para celíacos. Carnes, pescados, frutas y verduras frescas quedan fuera de la lista mientras que galletas, mermelada o pan de hamburguesa si entran en los alimentados ofertados. Esta cesta a precio limitado, estará disponible desde el 12 de septiembre al 8 de enero.

La cadena de supermercados ha implementado en Francia una acción diferente para paliar la inflación: el fijar los precios de artículos básicos durante 100 días.

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