SAMUEL VÁZQUEZ, PRESIDENTE DE UNA POLICÍA PARA EL SIGLO XXI, DESARMA A LA MINISTRA DE IGUALDAD

Vean el viral alegato de este policía desmontando el circo de Irene Montero y su ‘banda de la tarta’

Denuncia la falta de atención real a las mujeres que sí son verdaderamente víctimas de las agresiones

Brutal.

Sencillamente un vídeo que no debe caer en olvido.

Samuel Vázquez, presidente de Una Policía para el Siglo XXI, desmonta en un abrir y cerrar de ojos el circo que Irene Montero y su ‘banda de la tarta’ han levantado para vivir del cuento.

Este agente tiene claro que la ministra de Igualdad y su grupo de acólitas solo están pendientes de poner la mano para incrementar año tras año el presupuesto que les corresponde a su departamento.

Sin embargo, y aquí viene lo grave, el asunto más trascendental, asegura que la atención y la protección a las mujeres víctimas de la violencia de género les trae sin cuidado.

Para Vázquez, lo único que hacen estas podemitas es montar el show de las ofendiditas cuando, por ejemplo, Carla Toscano (VOX) hizo un fiel retrato de los ‘méritos’ de Irene Montero cuando, curiosamente, años atrás fue Pablo Iglesias, su pareja, la que dijo lo mismo sobre Ana Botella, la esposa de José María Aznar, y nadie pareció indignarse por las palabras del ‘macho alfa’.

Apunta como dato inicial que tiene fundadas sospechas de que el ministerio de Irene Montero ha convertido el drama de la violencia contra las mujeres en un negociete:

Si tú conviertes un drama en un negocio, estás invitando a que se expanda y se perpetúe. Hay gente que vive de esto y no quiere que esto acabe. Así que todas las políticas ya van destinadas a controlar o a sostener los problemas para mantener los presupuestos. Tú no puedes convertir un drama en un negocio. Un drama es un drama y hay que tratarlo como tal. Un drama no puede tener una solución buena.

Por eso todos los tuits de la ministra de Igualdad acaban con futuribles: «No pararemos hasta…». ¿Qué es no pararemos hasta…? Sabe de sobra que va a haber asesinatos siempre, desde que la Humanidad es Humanidad, porque siempre hay personas malvadas. Tú no vas a acabar con esto. Es mentira. No pararemos hasta… es la invitación a seguir recibiendo presupuesto.

Ojalá no, pero si dentro de 20 años pudiéramos reunirnos otra vez todos aquí y siguieran los mismos gobernantes que tenemos ahora, los tuits de Irene Montero serían los mismos. Así no se protege a las mujeres. ¿Qué sentido tiene hacernos creer que todos los asesinatos y homicidios, cuando la víctima es pareja o expareja, tiene como base el machismo? Hay decenas de razones por las que un ser humano puede matar a otro ser humano. ¿Por qué se nos ha prohibido estudiar el resto de razones desde una perspectiva criminológica que es como ayudaríamos de verdad a las mujeres?

El numerito de las ofendiditas

El policía también pone sobre la mesa el trilerismo puesto en marcha por Irene Montero y sus compinches a la hora de intentar desviar la atención de lo importante.

Y saca a colación los ataques contra Carla Toscano (VOX) por copiar milimétricamente lo que Pablo Iglesias dijo sobre Ana Botella:

Irene Montero se hizo la víctima por un comentario de Carla Toscano que fue el mismo que hizo su expareja, el hombre que escogió para compartir su vida y ser el padre de sus hijos, hace cinco años en la televisión sobre Ana Botella. Ahora hace el mismo comentario sobre ti Carla Toscano y montas un circo de victimización.

Las víctimas de verdad son otras. Y mientras estamos atendiendo al circo, estamos desatendiendo a las verdaderas víctimas. Yo lo sé porque llevo 20 años atendiéndolas. Trabajo en un grupo de respuesta y respondo llamadas del 091 y del 112 durante toda la noche. Yo llego cuando está llorando en el suelo con la cabeza partida para intentar detener al que se la ha partido. A esas mujeres las tenemos arrinconadas y el dinero va destinado al circo

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Los vídeos más vistos

Lo más leído