'LA SEGUNDA DOSIS DE VERANO'

Pedro Sánchez ha conseguido que Alberto Núñez Feijóo se avergüence de su ideología

Una de las tareas pendientes de la derecha española es desmontar el estigma que implica el posicionarse bajo esta corriente. Y es justamente Feijóo, en su papel de líder del partido mayoritario de derechas, quien debería reivindicarlo

No son buenos momentos para el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo.

Y es que las probabilidades de que el candidato ganador de las elecciones del pasado 23 de julio forme gobierno son prácticamente nulas. Tendría que pasar algo realmente improbable, como es el apoyo de Carles Puigdemont y su partido, Junts, a su candidatura. Por contra, es el presidente en funciones, Pedro Sánchez, quien tiene el panorama más claro para seguir en La Moncloa.

A pesar de obtener mayor votos y curules que cualquier otra formación, el gallego no ha cumplido con los pronósticos que vaticinaban una mayoría absoluta del centro derecha. Como señaló ayer el exdiputado popular Mario Garcés en una imperdible participación en La Segunda Dosis, tanto el PP como VOX deben hacer autocrítica.

Y una de las causas de no haber logrado el resultado esperado es el hecho de que tanto Feijóo como el PP ofrecen una imagen que parece que se avergüenzan de su ideología. Un punto muy bien aprovechado por Sánchez durante la campaña, explotando los pactos regionales y el miedo entre sus votantes para movilizarlos.

La demonización permanente de VOX, el partido más cercano y con quien, de acuerdo a los pronósticos, tenía que pactar a juro para formar Gobierno es un ejemplo de ello. El aseverar que preferirían pactar con un PSOE sanchista antes que con los de Santiago Abascal, cuando afirmaban que el objetivo principal era desmontar al sanchismo, es una contradicción que espanta votos. Más, porque se produjo en medio de una negociación en distintas comunidades para formar gobierno. Totalmente ilógico por parte de las dos formaciones.

Pero es que además, el empleo de la “moderación” por parte del gallego como arma arrojadiza para evitar situarse en el mapa político, tampoco ha servido para lograr el objetivo. Todavía peor, da la sensación de debilidad y de vergüenza a una postura política, el ser de derechas, que no tiene nada de reprochable. Algo que también redunda en una disminución del apoyo del votante.

Una de las tareas pendientes de la derecha española, es precisamente, desmontar el estigma que implica el posicionarse bajo esta corriente. Y es justamente Alberto Núñez Feijóo, en su papel de líder del partido mayoritario de derechas, quien debería reivindicarlo.

Este y otros asuntos de actualidad política serán discutidos en La Segunda Dosis de este martes, 1 de agosto de 2023, junto al Coronel Diego Camacho.

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