Ester López Moro es una empresaria e influencer, una mujer de bien que un día tuvo que soportar cómo en la infectada Cataluña la robaban y golpeaban con extrema violencia.
Es en lo que se ha convertido la Comunidad Autónoma y particularmente, la ciudad de Barcelona que, de la mano de Ada Colau, ha llegado a unos índices de criminalidad tremendamente bochornosos. Todo el mundo sabe que esta ciudad, otrora una de las mejores de Europa, es ahora un nido de violentos, ladrones, carteristas y mafiosos.
Charlamos en el plató de Periodista Digital con esta mujer empresaria que cuenta con todo lujo de detalles el infierno que vivió en tierras catalanas. Por suerte, los vecinos cogieron al maleante y no le dejaron escapar.
López Moro desvela que esta fue la segunda ocasión que sufre un ataque. La primera fue en un parque a plena luz del día.
“No tenemos ningún tipo de protección por parte del sistema, las fuerzas de seguridad hacen lo que pueden pero están de manos atadas. Cuando puse la denuncia a la policía me dijeron que no podían ir al narcopiso, a pesar de que sabía dónde estaba”.
La influencer también contó todas las vicisitudes que pasó luego de este primer ataque y lo peor es que, estando todavía en recuperación, sufrió el segundo ataque. “Salí a pasear el perro, todavía tenía la bolsa de sangre que drena los fluidos”.
Comenta que la lucha en esta segunda agresión no es por el móvil sino por la rabia y la impotencia. El sentimiento de impotencia y desprotección por parte de la ley es muy grande”.