Los periodistas deben enfrentarse a una autoridad que no acepta la crítica ni el trabajo periodístico.
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Lo han matado por ser periodista en Durango, México. Un lugar que se ha convertido en bastión del crimen organizado, los narcos y la violación de los derechos humanos más despiadada.
La pobre defensa que viven los comunicadores mexicanos ante el crimen organizado y el narcotráfico en el país más peligroso de América a la hora de desarrollar esta profesión, se ha puesto de manifiesto con el asesinato de otro periodista: el reportero de 39 años, Bladimir Antuna García.
10 HORAS DESPUÉS DE SU SECUESTRO
Según fuentes de la Fiscalía, su cadáver fue hallado estrangulado junto al lecho de un lago seco aproximadamente diez horas después de que fuera secuestrado por un grupo de desconocidos en plena calle de la ciudad de Durango, en el noroeste de México, según recoge Efe.
El reportero del periódico ‘El Tiempo de Durango’, dedicado a cubrir noticias de sucesos y de orden público. Antuna García había sufrido ya el pasado 28 de abril un atentado, cuando un grupo de desconocidos intentó sorprenderlo a la salida de su domicilio, pero logró esconderse y los disparos de sus atacantes pegaron sobre la fachada de su casa.
REPORTEROS SIN FRONTERAS
Tal y como ha informado Reporteros Sin Fronteras a través de un comunicado, el estado de Durango «bastión del crimen organizado donde impera la impunidad, se ha convertido en un infierno para quienes defienden una prensa libre y una información transparente».
«Una vez más, hacemos un llamamiento a las autoridades federales para que creen programas de protección que terminen con este siniestro recuento»
Este es el enésimo caso que envuelve a un periodista dentro de estas prácticas criminales. Ya a mediados de mayo pasado, el periodista Eliseo Barrón Hernández, de 36 años y especialista en temas policiales, fue secuestrado por encapuchados que irrumpieron en su domicilio de la ciudad de Torreón cuando se encontraba con su mujer y sus dos hijas.
RSF asegura que este año han muerto en México 10 reporteros, los atacantes de Barrón son «presumiblemente» de la mismaorganización que los asesinos de Antuna García.
FUEGO CRUZADO
Darío Ramírez, director para México y Centroamérica de la ONG británica Article 19:
Los periodistas deben enfrentarse a una
autoridad que no acepta la crítica ni el trabajo periodístico.
Un clima de inseguridad en todo el país y el fuego cruzado de la guerra del gobierno contra el narcotráfico.
Y lamenta:
La falta de solidaridad de los medios de comunicación mexicanos, que no han establecido un frente común, ni hacen llamamientos enérgicos para poner fin a la violencia.
Enrique Santos Calderón, presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP):
Esta peligrosa situación que padecen los periodistas mexicanos nos obliga a comprometernos aún más para enfrentar este desafío.