La Junta directiva de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), reunida hoy en Pamplona, ha aprobado la «Declaración de Pamplona», en la que insta a los editores a entender �el periodismo de calidad como un buen negocio�, realiza autocrítica por la pérdida de credibilidad de la profesión y denuncia la banalización de la información «en determinadas cadenas de televisión».
La «Declaración de Pamplona» reclama también el fin de las grabaciones enlatadas y de las ruedas de prensa sin preguntas y recuerda «a los periodistas que hacen anuncios publicitarios con ánimo de lucro que nuestro Código ético y deontológico declara incompatible de la profesión periodística con la publicidad remunerada».
«En un momento en que la profesión atraviesa la peor crisis de su historia -con la pérdida de más de 3.400 puestos de trabajo en los dos últimos años, en datos del Observatorio de la Crisis dirigido por la FAPE-, la Federación llama a los editores a negociar con los representantes sindicales un futuro viable para sus empresas, que acabe con la precariedad laboral que padecen los profesionales de la información y que también afecta a becarios que asumen responsabilidades propias de un puesto de trabajo estructural sin remuneración alguna�.
De hecho y a petición de la FAPE, la Inspección de Trabajo se ha comprometido a reforzar el control sobre las condiciones de este periodo de aprendizaje.
La directiva ha decidido también impulsar la creación de los colegios profesionales de periodistas, �que no se entienden solo como estructuras de defensa de los intereses profesionales, sino que aseguran la calidad de un servicio ciudadano, que en este aso es el derecho a la información�, subraya la Declaración.
cuanto a los derechos de autor de los periodistas, la Federación exige una vez más a su reconocimiento moral y económico e insta a los sindicatos a incluirlos en la negociación de los convenios colectivos.